que nos trasmite él año nuevo aymara
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Cada amanecer del 21 de junio, las ruinas altiplánicas de Tiwanaku dan lugar a un ritual que por siglos ha perdurado en Sudamérica. Es el Año Nuevo Aymara. Un acontecimiento que reúne tradiciones, culturas y la cosmovisión de los pueblos indígenas andinos que se niegan a morir.
Explicación:
Respuesta:
otro nuevo año de esperanza, amor, fortalezas, sueños, metas,
Explicación:
México
En últimos años ha cobrado popularidad entre la gente usar, durante la Nochevieja, ropa interior de color rojo, para atraer el amor; y ropa interior amarilla, para atraer el dinero. Hay quienes salen con una maleta a la puerta de la casa, dando un pequeño recorrido por la calle donde habitan, con la ilusión de tener la suerte de salir de viaje durante este año que comienza.
En este país hay muchos ritos y creencias que prometen un buen año (principalmente con salud, dinero y amor). Entre las más populares, además de las ya mencionadas, existe la creencia de poner un pequeño borrego de plástico, o de materiales diversos, detrás de la entrada principal de una casa durante las primeras horas del año, para atraer dinero. Otra es hacer dobleces en forma de pirámide a un billete de un dólar y ponerlo en la cartera; así como envolver monedas en un lienzo rojo y ponerlo dentro del monedero. También hay la creencia de comer un plato de lentejas hervidas justo a la media noche, o bien usar la ropa interior al revés con los mismos deseos de suerte. También es común encontrar en los mercados tradicionales perfumes, mezclas de semillas, limpiadores de piso y brujos y especialistas en temas como tarot y signos del zodiaco haciendo las famosas "limpias". Todo esto con fines de, según los vendedores, atraer un año con prosperidad.
La cena de Víspera de Año Nuevo es muy variada, desde pavo al horno, pozole rojo o verde (de pollo o de puerco), romeritos, lomo, bacalao, pierna de cerdo y ensalada de manzana (esto, en el centro del país), así como los tradicionales chipotles capeados y rellenos de queso o chiles huachinangos rellenos de atún. En el norte del país se acostumbra el cabrito, la fritada, así como la carne asada y pastel de carne. En la región sureste se opta por pastas dulces con fruta, comúnmente llamada "sopa de coditos" y el sandwichón (mezcla licuada de jamón, queso, pimiento morrón y mayonesa con sus capas de pan blanco).
Los "brindis" se hacen con sidra o champán, dando gracias por el año anterior y para tener éxito en el nuevo año. Es muy común el abrazo con las personas cercanas, como símbolo de cariño, y con las desconocidas, como muestra de amistad. Después de la cena, es costumbre que salga una persona a la calle a encender algunas luces o prender fuegos artificiales (llamados comúnmente "cohetes"), y luego ir a festejar con los amigos a alguna discoteca o casa con una mesa abundante de alimentos.
En algunos lugares del sur del país, suelen hacer un muñeco con trapos viejos y fuegos artificiales, representando el año que concluye, al cual queman a la medianoche, en lo que se llama la "Quema del Año Viejo". Otra costumbre que se tiene en algunos lugares de México, referente a despedir el año viejo y recibir el nuevo, es la de organizar y limpiar su casa, con la finalidad de que, con esa limpieza, se deseche lo que ya no es útil, y de este modo, tener espacio para recibir lo nuevo que llegará en el año que comienza. En algunos lugares costeros, se acostumbra salir después a ver el primer amanecer del año desde el mar.
En algunos estados de la república todavía se acostumbra disparar balazos al aire al comenzar el año nuevo, esta costumbre no está legalmente permitida, y cobra víctimas cada año.17
También es común en algunas familias hacer la "cuenta regresiva" y en el momento de contar "0" (que son las 12:00 de la noche), se comienza a reventar globos de colores, ya sea que estén en el suelo o pegados en la pared, para tener suerte en el año que entra; o bien, sentarse y volverse a parar en cada campanada, para el mismo fin. En México también se acostumbra comer las doce uvas por cada campanada (una tradición traída de España), por lo que también es una alternativa a las últimas creencias mencionadas.
Algunas personas tienen la costumbre de apuntar en un papel sus tres deseos más importantes, y a las 12 de la noche, quemar el papel en una taza blanca, claro sin que nadie más lo lea. Con esto se cree que se cumplirán.