¿Qué nos falta como sociedad para respetar el espacio personal de todas y de todos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El medio ambiente de un ser vivo está formado por todo aquello que le afecta. Los seres humanos vivimos en un espacio, en un entorno natural, rural o urbano, y debemos entender que respetar este entorno es un deber que tenemos como ciudadanos.
Las personas modificamos el Medio Ambiente con nuestras actividades: al talar árboles, al quemar combustible, al cultivar la tierra..., puesto que somos miles de millones de personas y disponemos de mucha tecnología, estas modificaciones pueden ser muy importantes y en general afectar a todos los ecosistemas. En estos últimos años hemos participado responsablemente en la conservación del MA, conscientes de la importancia de su conservación. Entre otras razones porque disponemos de los medios para lograrlo.
Veamos los principales problemas medioambientales que se derivan de la actividad humana:
• CONTAMINACIÓN: se produce al liberar al medio sustancias que tengan efectos negativos sobre el mismo.
• CALENTAMIENTO GLOBAL: efecto provocado por el exceso de dióxido de carbono en la atmósfera, que impide que parte de la radiación sea emitida hacia el espacio. Este fenómeno provoca que poco a poco la Tierra vaya aumentando la temperatura, lo que tiene como consecuencia inmediata el cambio acelerado del clima.
• DEFORESTACIÓN: la deforestación es la pérdida de bosques. Se produce para conseguir espacios para cultivos, para aprovechar la madera o construir carreteras, urbanizaciones, etc.
• PÉRDIDA DE BIODIVERSIDAD: la biodiversidad es la variedad de especies de seres vivos que hay en un ecosistema. La pérdida de biodiversidad es consecuencia directa de los tres problemas medioambientales anteriormente citados.
EL RESPETO A LA NATURALEZA
El respeto se refiere al saber valorar, el reconocer las necesidades de otro y de tener consideración.
Cuando el respecto se relaciona con la naturaleza se refiere a la valoración del Medio Ambiente en el que vivimos, de los animales, plantas y todo aquello que hace posible la vida en el planeta. Asimismo se refiere a la consideración hacia la naturaleza y al reconocimiento de las "necesidades" de la misma, que vendrían a ser las condiciones necesarias para que pueda seguir existiendo y desarrollándose como tal.
O sea el respecto por la naturaleza, no sólo es valorarla sino tomar las medidas necesarias para no dañarla, lo que viene a ser una conciencia ecológica.
Por tanto, el respeto a la naturaleza y al entorno es, ante todo, una cuestión de sentido común puesto que nuestro entorno influye y repercute directamente sobre nuestra salud y nuestro propio bienestar. Atacar el entorno y atacar a la naturaleza es, a la larga, atacarnos a nosotros mismos. Si no sabemos utilizar de manera lógica y equilibrada los recursos que la naturaleza nos ofrece estamos rompiendo una cadena de equilibrio y armonía, que se volverá en contra nuestra.
¿CÓMO PODEMOS CONTRIBUIR NOSOTROS AL CUIDADO DEL MEDIO AMBIENTE?
Es básico conocer la importancia que tiene el entorno para la vida de las personas en general. El cuidado del planeta y el respeto hacia el medio ambiente son asuntos en los que todos deberíamos sentirnos involucrados y por los que deberíamos esforzarnos diariamente para hacer nuestra pequeña contribución.
Todo el mundo sabe que hoy en día el cuidado del medio ambiente es fundamental para nuestra calidad de vida actual y para nuestros hijos en el futuro. Muchas veces culpamos a las grandes industrias de algunos problemas ambientales como la contaminación o el excesivo gasto energético, pero no tomamos conciencia de que nosotros también podemos ayudar desde casa.
Desde muy pequeños, podemos y debemos aprender a respetar el entorno (nuestras cosas, nuestra casa, la ciudad o el pueblo donde vivimos, la naturaleza...). Es necesario que, desde que se empiece a tener uso de razón, la relación con la naturaleza y con la comunidad sea respetuosa. Saber que pequeñas y simples actitudes pueden contribuir al cuidado de la naturaleza y a evitar problemas ambientales.
Lo primero es que debemos aprender a respetar nuestro entorno más inmediato: si vamos pintando las paredes o mesas, dejando papeles por donde pasamos, ensuciando calles y plazas y más, difícilmente seremos sensibles a problemas más globales.
Las mejoras ambientales no sólo se pueden dar desde plataformas ambientales organizadas y fuertes, sino que los individuos podemos realizar pequeños cambios que pueden llegar a ser de gran importancia. Los pequeños cambios son poderosos puesto que pueden llegar a tener una influencia universal. Cada día realizamos un montón de acciones y actividades en nuestros hogares que pueden tener efectos más o menos agresivos sobre el medio ambiente: la energía que utilizamos, la forma de trasladarnos, el reciclaje de los residuos que generamos, el consumo del agua, el uso de materiales tóxicos...
Por tanto, debemos actuar en la medida de lo posible de forma que los efectos de nuestras acciones impacten lo menos posible.