¿Qué nos enseña Jesús en Mateo 13,3-19;18-23?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Jesús explica por qué enseña con parábolas — Enseña las parábolas del sembrador, del trigo y la cizaña, del grano de mostaza, de la levadura, del tesoro escondido en el campo, de la perla de gran precio y de la red echada en el mar — Nadie es profeta en su propia tierra.
1 Y aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar.
2 Y se congregó junto a él mucha gente; y entrando él en una barca, se sentó, y toda la gente estaba en la ribera.
3 Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
4 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y se la comieron.
5 Y parte cayó en apedregales, donde no había mucha tierra; y brotó enseguida, porque no tenía profundidad de tierra;
6 mas cuando salió el sol, se quemó; y se secó, porque no tenía raíz.
7 Y parte cayó entre espinos, y los espinos crecieron y la ahogaron.
8 Y parte cayó en buena tierra y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta y cuál a treinta por uno.
9 El que tiene oídos para oír, oiga.
10 Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por aparábolas?
11 Y él, respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es concedido saber los amisterios del reino de los cielos, pero a ellos no les es concedido.
12 aPorque a cualquiera que tiene, se le dará y tendrá más; pero al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
13 Por eso les hablo por parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden.
14De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dice:
De aoído oiréis, y no entenderéis;
y viendo veréis, y no percibiréis.
15
Porque el acorazón de este pueblo se ha engrosado,
y con los oídos oyen pesadamente,
y bhan cerrado sus ojos,
no sea que vean con los ojos,
y oigan con los oídos,
y entiendan con el corazón,
y se conviertan,
y yo los csane.
16 Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen.
17 Porque de cierto os digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
18 Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador:
19 Cuando alguno oye la palabra del reino y no la aentiende, viene el malo y barrebata lo que fue sembrado en su corazón; este es el que fue sembrado junto al camino.
20 Y el que fue sembrado en pedregales, este es el que oye la palabra y de inmediato la recibe con gozo.
21 Pero no tiene raíz en sí, sino que es temporal, y cuando viene la aaflicción o la bpersecución por la palabra, enseguida cse ofende.
22 Y el que fue sembrado entre espinos, este es el que oye la palabra; pero ael afán de este mundo y el bengaño de las criquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, este es el que oye y aentiende la palabra, y el que da bfruto; y da uno a ciento, y otro a sesenta y otro a treinta por uno.
espero y te sirva