¿Que es utopía y barbarie en literatura?
Respuestas a la pregunta
El concepto de Utopía surgió en la época del renacimiento, y se refiere a un mundo que no existe pero que es perfecto, donde los valores humanos prevalecen. El termino fue creado por Tomas Moro ya que en una de sus obras lo aplica a una comunidad en una isla inexistente donde la estructura política, social y económica es impecable que se comparaba con ciertos aspectos de la comunidad europea de aquella época. Una utopía es un estado imaginario que agrupa la totalidad de las perfecciones y posibilita una existencia feliz, donde hay paz y justicia es un mundo carente de violencia. La utopía está asociada con la literatura de viajes donde se proyectaban las angustias de las sociedades civilizadas.
La barbarie por otro lado, es un término acuñado en tiempos del imperio romano y es la brutalidad y atrocidad derivada de la ignorancia, la superstición, la estupidez, el error y las preocupaciones, la barbarie implica falta de educación y talento en la manera de comportarse de un individuo, grupo o comunidad. Los romanos solían llamar bárbaros a los extranjeros que ellos consideraban, tenían costumbres primitivas y rudas. Así, la barbarie es lo contrario a las pautas culturales de una comunidad.
Respuesta:
LA UTOPÍA.- es un estado imaginario que reúne toda las perfecciones y que hace posible una existencia feliz porque en él reina la paz y la justicia.
BARBARIE.- es una actitud poco civilizada, agresiva semejante al comportamiento animal ya que el acontecimiento en el que aparece especialmente la conducta barbara en el ser humano es la guerra donde se manifiesta el mal y la agresividad con mas intensidad.
Explicación:
se dice que en utopía hay un importante componente ideal, que surge de los defectos de la sociedad y se basan en la posibilidades de cambio y transformación que esta tiene en cada momento.
Lo esencial de este pensamiento es la búsqueda de una sociedad justa y regida por el principio de un buen común.
Podemos decir que utopía y barbarie hacen referencia por un lado al fracaso civilatorio de la modernización de los estados y, por otro lado al fracaso de los intentos revolucionarios socialistas que pretendían construir un proyecto utópico.