Castellano, pregunta formulada por sandia88, hace 8 meses

que es un apologo?, quien lo invento? y un ejemplo de apologo.

Respuestas a la pregunta

Contestado por davidyordanore12345
9

Respuesta:El apólogo es un relato corto, en prosa o verso, escrito con intención didáctica y moralizante. Tiene un origen oriental, alcanzó una gran difusión durante la edad media, etapa en la que europeos y orientales intercambiaron gran cantidad de productos y costumbres.

El apólogo es una forma de narración escrita que  moral a quien lo lee. Busca lo mismo que una leyenda. La diferencia central está en que, en los apólogos, los personajes no se ven representados por animales u cualquier otro tipo de objeto

Ejemplos de apólogo:

 

El sultán y el campesino

Cuenta la historia que un sultán salía de las fronteras de su palacio cuando, al cruzar por el campo se encontró con un anciano que plantaba una palmera.

Ante tal acto el Sultán le dijo:

Oh! Anciano ¡Que ignorante eres! ¿No ves que la palmera tardará años en dar sus frutos y tu vida ya se encuentra en el ocaso?

El anciano lo miró con bondad y le dijo:

¡Oh Sultán! Plantamos y comimos. Plantemos para que coman.

Frente a la sabiduría del anciano el Sultán, sorprendido le entrega unas monedas de oro en señal de agradecimiento. El anciano hace una pequeña reverencia y luego le dice:

Has visto ¡Oh Rey! que pronto ha dado sus frutos esta palmera…


sandia88: gracias!!!
Contestado por delfinmar97
6

Respuesta:

Un apólogo es un tipo de narración que se escribe o relata con el objetivo de transmitir una enseñanza moral. Estos relatos surgieron en oriente durante la Edad Media y tienen la misma finalidad que la leyenda pero, a diferencia de ésta, sus personajes son personas (y no animales como en las leyendas o en las fábulas).  

Características del apólogo

Suelen escribirse en prosa.

Son de carácter explicativo y tienen una extensión mediana o extensa.

No utilizan lenguaje técnico o formal.

Utilizan relatos que se asemejan a hechos reales.

No son historias fantásticas sino que sus hechos son creíbles y cotidianos.

Su objetivo es dejar una enseñanza moral y perfeccionar el autoconocimiento y la reflexión del lector u oyente.

Ejemplos de apólogos

El anciano y el cuarto nuevo

Cuenta la historia que un anciano acababa de enviudar cuando llegó al asilo, su nuevo hogar. Mientras el recepcionista le informaba sobre las comodidades de su cuarto y la vista con la que contaría en dicha habitación, el anciano permaneció por unos segundos con la mirada perdida y luego exclamó: “Me gusta mucho mi nuevo cuarto”.

Ante el comentario del anciano, el recepcionista le dijo: “Señor, aguarde que en unos minutos le mostraré su cuarto. Ahí podrá evaluar si le agrada o no”. Pero el anciano le respondió rápidamente: “Eso no tiene nada que ver. No importa cómo sea mi nuevo cuarto, yo ya he decretado que mi nuevo cuarto me gustará. La felicidad se elige por adelantado. Si me agrada o no mi cuarto no depende del mobiliario o la decoración, sino de cómo yo decido verlo. Yo ya he decidido que mi nuevo cuarto me agradará. Esa es una decisión que tomo cada mañana al levantarme”.

El turista y el hombre sabio

En el siglo pasado un turista fue a visitar El Cairo, en Egipto, para conocer al anciano sabio que vivía allí.

Al ingresar a su casa, el turista se percató de que no había muebles, vivía en un pequeño cuarto muy simple donde solo había unos cuantos libros, una mesa, una cama y un banco pequeño.

El turista se asombró por la escasa posesión de sus bienes. “¿Dónde están sus muebles?”, preguntó el turista. “¿Y dónde están los suyos?”, respondió el sabio. “¿Mis muebles? Pero si yo solo estoy de paso”, se asombró aún más el turista. “Yo también”, le contestó el sabio, y agregó: “la vida terrenal es solo temporal, pero muchas personas viven como si fueran a quedarse eternamente aquí y se olvidan de ser felices”.

Quien lo invento

El origen de la historia se remonta al siglo VI a.C. cuando el rey persa Nixhue, envió a Barzuyeh, médico de su corte, a la India en busca de unas hierbas que se decía, tenían la virtud de resucitar a los muertos. Una vez allí, hizo varias experiencias sin obtener resultados satisfactorios. Consultó entonces con los sabios del país, quienes le dijeron que lo que él llamaba hierba era para ellos una serie de libros que ilustraban el entendimiento de los ignorantes. Esos libros, conocidos como Calila y Dimna -que era sólo el nombre de su primer relato- habían sido escritos por los sabios y los sacerdotes, quienes habían encontrado en los animales, protagonistas para sus historias cargadas de enseñanzas religiosas.

El aplicado Barzuyeh trasladó esas escrituras al pahlevi, o lenguaje literario de Persia, y retornó con ellas. A su traducción agregó unos escritos del Panchatantra (colección de apólogos hindúes), y lo reunió todo en un solo volumen cuyo fin sería servir de ejemplo y guía a su rey y a los que le sucediesen. La versión de Barzuyeh y el original en sánscrito están hoy perdidas. Solo hay dos versiones de aquella, una en siríaco del siglo VI a.C., y otra en árabe, aproximadamente de la misma fecha. Del árabe se tradujo al griego, al persa, al hebreo y al castellano, siendo la versión latina y la castellana las que mejor representan al original árabe. En Grecia sería entonces, donde encontraría sus principales cultores.

Explicación:

Otras preguntas