qúe empreza financió una compañia multimillonaria de desprestigio a Molina y Rowland?
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Respuesta:
En 1974, en un artículo que ha sido citado cientos de veces, escrito en colaboración con Frank Rowland, ambos denunciaron el peligro de que la ozonosfera (capa de ozono que protege a los seres vivos de la acción de los rayos ultravioleta de la luz solar) pueda ser destruida por la acción de ciertas sustancias fruto de la actividad humana, los clorofluorcarbonos (CFCs), compuestos orgánicos que contienen cloro y flúor que se han utilizado de forma masiva en aerosoles y refrigeradores. De acuerdo con los estudios de Molina y Rowland, al llegar a las capas altas de la atmósfera los CFC se disocian, dejando libre los átomos de cloro y flúor, que reaccionan con el ozono, destruyendo está molécula, formada por tres átomos de oxígeno. En 1995 Molina y Rowland compartieron el premio Nobel de Química con Paul Crutzen por sus estudios sobre las amenazas para la estabilidad de la capa de ozono.
La teoría de Molina y Rowland, muy discutida al principio, ha recibido una confirmación espectacular con la aparición en los últimos años de agujeros de ozono (disminuciones significativas en su concentración) sobre los polos norte y sur, lo que ha provocado la prohibición internacional de los CFC en 1995, tras el llamado protocolo de Montreal. Antes de sus investigaciones la atmósfera parecía el gran sumidero de la Tierra, capaz de absorberlo todo.
Algunos gases por su estabilidad química y escasa concentración, pueden llegar hasta la estratosfera, sin reaccionar, allí se rompe y liberan cloro o flúor atómico que son capaces de atacar al ozono a través de reacciones en cadena. El cloro o el flúor atómico se combinan con el oxígeno atómico impidiendo que se forme de nuevo mas ozono; después el óxido de cloro puede reaccionar con otro átomo de oxígeno y se forma O2 y se libera de nuevo cloro atómico que repite el proceso. Actuando como una reacción en cadena catalizada, cayendo poco a poco sobre la troposfera, depositándose en la superficie con las lluvias. Los CFCs una vez que se emiten tardan de 3 a 7 años en llegar a la estratosfera para que se descomponga y su vida media es de unos 50 años. Como su producción se paró a finales de 1995, en medio siglo podemos arreglar el agujero de ozono.