Que elementos se tienen en cuenta para afirmar que la cartografía es una disciplina
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Todos los pueblos y civilizaciones antiguas fueron fieles observadores del cielo. Preguntas como dónde estoy y quién soy hallaban respuesta a través de mitos y leyendas referidas a los orígenes de la humanidad. “Todos los pueblos antiguos se proyectaron en el cielo, así fuera por el simple placer de admirar sus tesoros y durante miles de años, hasta el siglo XVIII, cuando se inventó el telescopio, los seres humanos siempre utilizaron el mismo medio para observar el cielo: sus propios ojos” (Puerta, 1997, p. 14). Esta característica de ser observadores de los ciclos de la naturaleza nos ha permitido a lo largo de la historia desarrollar prácticas y saberes espaciales, donde la naturaleza como base material y simbólica ha sido apropiada y transformada en una relación dialéctica con el ser humano, convirtiéndonos en un producto histórico derivado de una serie de interacciones con el espacio geográfico (Moreira, 2011).
La necesidad de representar el conocimiento que surge de la práctica y del saber espacial se ha visto transformado históricamente por el avance de la técnica, como lo evidencian la pintura rupestre, los complejos megalíticos, los tejidos, los mapas y hasta la más antigua tablilla en escritura cuneiforme -“el mapa del mundo babilonio, el primer mapa del mundo del que se tiene noticia” (Brotton, 2014, p. 21)- acompañaron la forma de representar el mundo. Por lo tanto, nuestro lugar de conocimiento y observación es la primera referencia del mundo y está directamente relacionado con el lugar y el momento histórico en que nacemos y nos desarrollamos, que junto con la dimensión cultural “de la existencia humana, en ese nivel metafuncional de su comportamiento, es donde dicha existencia se afirma propiamente como tal” (Echeverría, 2001, p. 19), y la cual definirá nuestra forma de construir creencias, imaginarios, significaciones y por lo tanto representaciones
espero que te sirva ;b