que dificultades tenemos al tener que elegir el mal y el bien
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El mal supone, desde todo punto de vista y desde sus mismísimos inicios, que se pierden en la
noche de los tiempos, una insidiosa amenaza, un profundo enigma y un indudable desafío
intelectual y volitivo para la vida humana. Mente y voluntad se ven impelidas directamente, ante la
palmaria evidencia de su impacto continuo en el transcurrir del mundo y la vida de individuos y
comunidades de toda clase y condición a lo largo de la historia conocida, a tratar de buscar una
respuesta legítima tanto al origen como a la solución o posible insolubilidad del mal, ya sea en el
plano natural, moral o metafísico de las cosas.
Pero, ¿qué es el mal? ¿Y su antítesis, el bien —o será al revés—? ¿De dónde procede el mal?
¿Cuándo se originó? ¿Qué sentido tiene? ¿Por qué tanto dolor y sufrimiento aparentemente
inútiles? ¿Es que carece de límites espaciales y temporales el mal? ¿Por qué parece, en ocasiones,
cebarse con los más justos y los inocentes —véase si no el caso paradigmático de Job—? ¿Qué
implicaciones o consecuencias se derivan del mal? ¿Cómo erradicarlo de una vez por todas de la
vida humana? ¿Es, acaso, esto último posible?
Estas y otras muchas cuestiones de gran calado contenidas en el problema han agitado por
centurias las mentes y vidas de insignes filósofos —y, por qué no decirlo, de todo ‘homo viator’ que
ha transitado alguna vez por la faz de la Tierra—, que han intentado encontrar respuestas —en
ocasiones de lo más variopintas, todo sea dicho— a las causas y consecuencias posibles planteadas
por la diatriba de la presencia del mal en la naturaleza y en el núcleo de la vida misma.
Explicación:
mi coronita plis :3
Respuesta:
La dificultad es que sabemos que nuestra decisión puede tener una reacción positiva o negativa
Explicación: