¿qué diferencias hubo entre los accidentes nucleares de chernobyl y fukushima?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
¿En qué se diferencian las estructuras de contención? Chernóbil no tenía estructura de contención y nada detuvo la trayectoria de los materiales radiactivos hacia el aire.
Explicación:
A continuación algunos puntos principales de las diferencias entre los dos accidentes.
¿Son iguales los modelos? La unidad 4 de Chernóbil era un reactor moderado por grafito y refrigerado por agua -una combinación que puede y dio una reacción en cadena descontrolada. Una serie de errores graves y equivocaciones de los operadores dieron como resultado una explosión y un incendio que lanzó la radiactividad a la atmósfera superior.
El resultado de la emisión de radiación se ha comparado con una cifra 10 veces superior a la liberada por la bomba atómica arrojada por EEUU sobre Hiroshima en 1945.
Los reactores con agua hirviendo en Fukushima no tienen un núcleo de combustible de grafito. Al combustible nuclear en los reactores 1, 2 y 3 se le permitió fundirse al menos en parte, pero los operadores han logrado desde entonces enfriar tanto los reactores como las piscinas de combustible usado y por ahora no se ha producido una reacción en cadena.
¿En qué se diferencian las estructuras de contención? Chernóbil no tenía estructura de contención y nada detuvo la trayectoria de los materiales radiactivos hacia el aire.
Los reactores de Fukushima están construidos sobre cimientos de granito y están rodeados por estructuras de acero y hormigón. Las vasijas del reactor y las estructuras de contención, así como algunas de las tuberías que conectan con el reactor, es probable que hayan resultado dañadas por el tsunami del 11 de marzo y las réplicas del seísmo posteriores. Sin embargo, los niveles de radiación ahora se han reducido notablemente desde los máximos alcanzados y los expertos dicen que las estructuras están aguantando.
Chernóbil contaminó un área de hasta 500 km desde la planta, y un perímetro de 30 km alrededor de la planta sigue siendo aún una zona de exclusión y deshabitada.
En Chernóbil, la explosión inicial provocó la muerte de dos trabajadores. Veintiocho bomberos y trabajadores de limpieza de emergencia murieron en los tres primeros meses tras la explosión de radiación aguda y uno murió de un paro cardíaco.
Chernóbil fue inicialmente encubierto por el reservado estado soviético, que permaneció en silencio durante dos días. Sin embargo, las autoridades, obligadas por las enormes emisiones de radiación a toda Europa, fueron poco a poco dando a conocer los detalles del accidente, demostrando una apertura sin precedentes en la era soviética.
¿Supone Fukushima un mayor riesgo si todo sale mal? Esto no ha terminado aún. Un mes después del terremoto y tsunami del 11 de marzo, los trabajadores aún tienen que inyectar agua a los reactores, creando más agua contaminada que está dificultando el restablecimiento de energía eléctrica para que funcionen las bombas de refrigeración de los reactores y poder llevarlos a una parada fría.
Fukushima supone la pérdida de control de cuatro reactores y materiales potencialmente más radiactivos, que podría seguir filtrándose, o provocar una fuga o explosión que impactarían directamente en el medio ambiente.
Respuesta:
FUKUSHIMA SE PUDO EVITAR
El informe sobre la crisis nuclear japonesa asegura que el tsunami no fue el causante de la catástrofe
ZIGOR ALDAMA
PEKÍN. Viernes, 6 julio 2012, 02:24
¿A quién se le ocurre construir una central nuclear en una costa seriamente amenazada por tsunamis? El mundo entero se hizo esta pregunta poco después de que la ola gigante desatada por el seísmo del 11 de marzo del año pasado impactó contra las instalaciones de Fukushima, provocando la peor crisis nuclear desde Chernóbil. Diez expertos independientes han sido los encargados de proporcionar una respuesta a esa pregunta después de haber entrevistado a 1.167 personas relacionadas con el suceso, y su conclusión no puede resultar más devastadora para las clases política y empresarial de Japón.
«A pesar de que el accidente en la planta de Fukushima fue desencadenado por el seísmo, no puede considerarse una catástrofe natural», escribe en el prólogo del informe más crítico hasta el momento el presidente de la comisión independiente que aprobó el Parlamento, Kiyoshi Kurokawa. «Fue un desastre provocado por el ser humano, que podría haberse previsto y evitado», sentencia antes de pasar a relatar la interminable cadena de errores y negligencias protagonizada por políticos y empresarios de Tepco, la eléctrica que opera la central. «Hay que reconocer que este ha sido un desastre 'made in Japan'», añade Kurokawa en referencia a los condicionantes sociales y culturales que se esconden detrás de un comportamiento que deja mucho que desear, y que ha dañado seriamente la reputación del país.
El estudio de 641 páginas detalla los factores que dejaron a la central nuclear «mal preparada» para hacer frente al tsunami y la pésima respuesta posterior que dieron tanto las autoridades como los dirigentes de Tepco. «Traicionaron el derecho de la nación a estar a salvo de accidentes nucleares», dispara el texto.
En primer lugar, los expertos recalcan que desde 2006 todas las organizaciones a las que critica eran conscientes de que un tsunami podía provocar un apagón total en las instalaciones. Sin embargo, aunque no habría sido difícil evitarlo, no se tomaron las medidas necesarias porque Tepco «solo miró por sus propios intereses» y el órgano de supervisión hizo la vista gorda. La propia compañía, que en un informe anterior se eximió de responsabilidad, ha reconocido recientemente que no estaba en condiciones de hacer frente al desastre en Fukushima.
Información
Cuando la tragedia ya era evidente, la actuación de empresa y Gobierno no mejoró. Al contrario. La eléctrica descartó demasiado rápido que el temblor pudiese afectar a los reactores, y los operarios técnicos se vieron obligados a trabajar después en las peores condiciones posibles. Mientras tanto, la información que se proporcionaba al público y, lo que es peor, a los dirigentes del país era opaca y escasa.
Eso podría explicar en parte la lentitud en la respuesta del Ejecutivo, sobre todo a la hora de decretar el estado de emergencia, pero no la confusión que generó entre las autoridades locales, que son las encargadas de coordinar la evacuación de los afectados. «Algunos residentes fueron llevados a zonas con altos niveles de radiación porque no se había facilitado información de control sobre radiactividad». Sin duda, las críticas de los expertos no dejan títere con cabeza. «Esta comisión ha encontrado ignorancia y arrogancia», sentencian.
La crisis de Fukushima continúa, lo mismo que algunos de los errores que la provocaron. Y esa es una gran amenaza para un país que pretende retomar la energía atómica. La comisión asegura que el Gobierno «no está comprometido con la protección de la salud y la seguridad públicas».
Por eso, los expertos piden «profundas reformas» que incluyan una nueva redacción de la legislación nuclear y, sobre todo, que no se lleven a cabo «soluciones cosméticas». «Cambiar a la gente de puesto o renombrar instituciones no va a solucionar nada», sentencia el informe.
Explicación:
“Según Kurokawa, la causa primaria que provocó el accidente de Fukushima consistió en que la eléctrica Tepco no tenía capacidad de respuesta para enfrentar una falla en los reactores ante un apagón por tsunami”.