que diferencia y similitudes encuentra cada región china y griega
Respuestas a la pregunta
Respuesta: Las relaciones entre el Imperio romano y China fueron indirectas a lo largo de la existencia de ambos imperios. El Imperio romano y el Imperio chino de la dinastía Han se acercaron progresivamente en el curso de la expansión romana hacia el Antiguo Oriente Próximo y las simultáneas incursiones militares chinas en Asia Central; sin embargo, poderosos imperios intermedios, tales como los partos y los kusháns, mantuvieron a las dos potencias euroasiáticas permanentemente separadas. Por ello, la conciencia del otro siguió siendo escasa y el conocimiento mutuo, difuso.
¿Cuáles son las diferencias entre las civilizaciones de la India y China?
China es una civilización sin religión y con el estado en el centro. India, una civilización marcada por la religión y la estructura social de castas. La primera con una tradición secular de alergia al pluralismo político, pero sin prejuicios de clase y con una escuela ancestral de promoción de los talentos.
Explicación:
Respuesta:los chinos operaron muy bien
sin muchos de los conceptos y preocupaciones clave en los griegos.
Pongamos por caso su estudio del firmamento, por ejemplo. Sin estar
preocupados por la idea de que fuera perfecto e inalterable, los chinos
vieron muchas cosas que a los griegos simplemente les pasaron desapercibidas: las supernovas, por ejemplo. El carácter sostenido de los estudios chinos sobre el calendario hace que resulte muy errático el trabajo
de los griegos y romanos en esa área. En torno a los ciclos de los
eclipses, en particular, los chinos desarrollaron ciclos más y más ajustados para la predicción de eclipses tanto lunares como solares a lo largo
de los 2000 años de historia de la Oficina Astronómica. Para la época
de Ptolomeo (siglo II d. de C.), los griegos eran, es cierto, capaces de
trazar posiciones solares y lunares de forma bastante precisa mediante
modelos que se basaban de forma marcada en datos babilonios. Pero
mientras los griegos, desde el siglo IV a. de C., estaban obsesionados
por explicar los movimientos planetarios mediante modelos geométricos
con el fin de demostrar que sus aparentes irregularidades resultaban de
combinaciones de movimientos perfectamente regulares, estaban en
general mucho menos interesados por —y eran menos capaces de—
predecir eclipses que los babilonios (quienes, por descontado, se entretenían en estos problemas mucho antes) o los chinos.
Explicación: