¿Qué actitud asumirían los europeos frente a los aborigenes americanos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Viajes de Cristóbal Colón
Colón y sus aliados tenían como meta principal alcanzar al "Gran Kan" (Asia). Así, mientras intentaban entrar en contacto con el "Rey de la tierra" variaba su trato a los indígenas según les consideraran más o menos importante para dicho objetivo. En su primer contacto, y al verificar su aparente no falta de señor y el nivel cultural de los antillanos, siguiendo los mismos principios que por ejemplo en las islas Canarias y el resto de los reinos, se les consideró «siervos naturales a los que era factible adscribir a Castilla».1 Como puede comprobarse en múltiples capítulos de la historia, era técnica habitual en esos tiempos la incorporación pacífica de los nuevos territorios si aceptaban la soberanía de los Reyes y el Cristianismo, o la conquista armada en caso de rechazar cualquiera de esos términos.
Hay diversas fases en la relación que Colón mantuvo con los indígenas, sin embargo todas ellas tienen en común el hecho de que el Almirante siempre consideró a los antillanos como a inferiores, autoridades sociopolíticas incluidas, y si les trató de una u otra forma fue por las circunstancias del momento, es decir, por conveniencia, no por las características de aquellos a cuyos territorios habían llegado.
La impresión de Colón sobre la superioridad armamentística y cultural de los nuevos llegados queda patente en las descripciones que realizaba de los indígenas taínos al buscar un lugar donde establecer una fortaleza para sus monarcas. Así, por ejemplo, dos días después de haber llegado a América, Colón escribió en su diario:
Domingo 14 de octubre:[...]vide un pedaço de tierra[...]el cual se pudiera atajar en dos días por isla, aunque yo no veo ser necesario, porque esta gente es muy símplice en armas, como verán vuestras altezas de siete que yo hize tomar para les llevar y deprender nuestra fabla y bolvellos. Salvo que vuestras altezas, cuando mandaren, puédenlos todos llevar a Castilla o tenellos en la misma isla captivos, porque con cincuenta hombres los ternán todos sojuzgados y los harán hazer todo lo que quisieren.
En el primer viaje Colón dejó un grupo de españoles instalados en la isla La Española (actualmente República Dominicana y Haití), en un fuerte ubicado en la costa norte y denominado Navidad.2 A su regreso, con el objetivo de establecerse sólidamente en las Indias y ampliar el descubrimiento para alcanzar los territorios de Catay' encontró a todos los españoles (unos 40 hombres) muertos y la colonia incendiada.2 Al buscar explicaciones convincentes le fue imposible encontrarlas y, a partir de este momento, sus relaciones con los indígenas fueron empeorando, llegando a amenazarles con hacerlos esclavos si no le entregaban grandes cantidades de oro y especias.2
En las Antillas, Colón tomó contacto con la cultura taína que se extendía por las islas del Caribe estimándose en 250.000 miembros al momento de la llegada de los españoles. En sus diarios, Colón presenta inicialmente a los taínos como una cultura socialmente indiferenciada, sin ninguna estructura socio-política. El 2 de noviembre de 1492 estableció el primer contacto con una alta autoridad taína, a la que prácticamente no le concede ninguna importancia en su diario. No fue hasta 6 de noviembre que Colón se percató de que los taínos constituían una sociedad estructurada, cuando Colón volvió a tener un segundo contacto con un señor taíno que fue a visitarlo a su campamento. Colón y su expedición seguía obsesionada con el Gran Kan y, comprobando que los caciques locales nada sabían de él, consideró que la estructura social taína no le era de ninguna utilidad, llegando a planear el secuestro de un cacique que había acudido a su campamento, algo que finalmente no realizó por miedo a una reacción violenta de los pobladores.1
Explicación:
Respuesta: Viajes de Cristóbal Colón
Colón y sus aliados tenían como meta principal alcanzar al "Gran Kan" (Asia). Así, mientras intentaban entrar en contacto con el "Rey de la tierra" variaba su trato a los indígenas según les consideraran más o menos importante para dicho objetivo. En su primer contacto, y al verificar su aparente no falta de señor y el nivel cultural de los antillanos, siguiendo los mismos principios que por ejemplo en las islas Canarias y el resto de los reinos, se les consideró «siervos naturales a los que era factible adscribir a Castilla».1 Como puede comprobarse en múltiples capítulos de la historia, era técnica habitual en esos tiempos la incorporación pacífica de los nuevos territorios si aceptaban la soberanía de los Reyes y el Cristianismo, o la conquista armada en caso de rechazar cualquiera de esos términos.
Hay diversas fases en la relación que Colón mantuvo con los indígenas, sin embargo todas ellas tienen en común el hecho de que el Almirante siempre consideró a los antillanos como a inferiores, autoridades sociopolíticas incluidas, y si les trató de una u otra forma fue por las circunstancias del momento, es decir, por conveniencia, no por las características de aquellos a cuyos territorios habían llegado.
La impresión de Colón sobre la superioridad armamentística y cultural de los nuevos llegados queda patente en las descripciones que realizaba de los indígenas taínos al buscar un lugar donde establecer una fortaleza para sus monarcas. Así, por ejemplo, dos días después de haber llegado a América, Colón escribió en su diario:
Domingo 14 de octubre:[...]vide un pedaço de tierra[...]el cual se pudiera atajar en dos días por isla, aunque yo no veo ser necesario, porque esta gente es muy símplice en armas, como verán vuestras altezas de siete que yo hize tomar para les llevar y deprender nuestra fabla y bolvellos. Salvo que vuestras altezas, cuando mandaren, puédenlos todos llevar a Castilla o tenellos en la misma isla captivos, porque con cincuenta hombres los ternán todos sojuzgados y los harán hazer todo lo que quisieren.
En el primer viaje Colón dejó un grupo de españoles instalados en la isla La Española (actualmente República Dominicana y Haití), en un fuerte ubicado en la costa norte y denominado Navidad.2 A su regreso, con el objetivo de establecerse sólidamente en las Indias y ampliar el descubrimiento para alcanzar los territorios de Catay' encontró a todos los españoles (unos 40 hombres) muertos y la colonia incendiada.2 Al buscar explicaciones convincentes le fue imposible encontrarlas y, a partir de este momento, sus relaciones con los indígenas fueron empeorando, llegando a amenazarles con hacerlos esclavos si no le entregaban grandes cantidades de oro y especias.2
En las Antillas, Colón tomó contacto con la cultura taína que se extendía por las islas del Caribe estimándose en 250.000 miembros al momento de la llegada de los españoles. En sus diarios, Colón presenta inicialmente a los taínos como una cultura socialmente indiferenciada, sin ninguna estructura socio-política. El 2 de noviembre de 1492 estableció el primer contacto con una alta autoridad taína, a la que prácticamente no le concede ninguna importancia en su diario. No fue hasta 6 de noviembre que Colón se percató de que los taínos constituían una sociedad estructurada, cuando Colón volvió a tener un segundo contacto con un señor taíno que fue a visitarlo a su campamento. Colón y su expedición seguía obsesionada con el Gran Kan y, comprobando que los caciques locales nada sabían de él, consideró que la estructura social taína no le era de ninguna utilidad, llegando a planear el secuestro de un cacique que había acudido a su campamento, algo que finalmente no realizó por miedo a una reacción violenta de los pobladores.1
Ramos Gómez concluye:1
De lo sucedido se desprende que no es cierto que en Río de Mares Colón descubra que los antillanos tienen una estructura sociopolítica compleja, ya que lo sabía desde muchos días antes, no dándola importancia, porque no le era útil para sus planes, que aún seguían centrados en alcanzar «las grandes ciudades del Gran Can, que se descubrirán sin duda, y otras muchas de otros señores que habrán en dicha servir a Vuestras Altezas» [...] Y frente a estos objetivos ¿Qué podía representar ese cacique con su nitaino y su hijo? ¿qué importancia tenía él, su espacio o sus súbditos? Indudablemente, ninguna, por lo que actuó con respecto a ellos como había hecho desde el primer día en San Salvador: despreciando su figura y su significado político.
Explicación: no se si te ayude es lo unico que se