Que acontecimiento politico-social da inicio a la edad media
Respuestas a la pregunta
Explicación:
Seguro que al escuchar la palabra “medieval” te viene a la mente una época oscura, donde reinaba la violencia y la censura. Bien, puede que de la Edad Media tengamos menos documentación y eso lo haga un poco “oscura”, pero es en ella donde se gestaron las bases de la sociedad actual. Aquí te dejamos 12 de los acontecimientos que marcaron esta época fundamental.
En el scriptorium los monjes copiaban las obras de la antigüedad para que no se perdieran.
1- Caída del Imperio Romano de Occidente 476 d.C.
Esta es la fecha donde se suele colocar el inicio de la Edad Media. El 4 de septiembre del 476 Odoacro, un jefe germánico, destituyó a Rómulo Augústulo, último emperador de Roma. Se culminaba así todo un proceso de varios siglos en los que el Imperio ya había entrado en decadencia. ¿Cuáles fueron las causas? A partir del s. III las provincias del Imperio restaron poder a la propia Roma, puesto que las diferentes legiones repartidas por el Imperio intentaban aupar a sus generales al trono imperial, lo que provocó un clima de gran inestabilidad política. A ello hay que sumar las sucesivas intrusiones de los pueblos bárbaros dentro del imperio, el auge del cristianismo… sin contar con las repercusiones que todo ello provocaba en la economía. El emperador Diocleciano, para acabar de arreglarlo, dividió el Imperio en dos, Oriente y Occidente. Cada parte estaba gobernada por dos Césares (poderes militares) y dos Augustos (poder político), esto se conoció como “Tetrarquía“. Fue la mitad occidental la que cayó en el año 476, pero Oriente, lo que se conocería como Bizancio, sobrevivió a las invasiones y se hizo fuerte en torno a la capital del Imperio, la ciudad que fundó siglo y medio antes (año 330) el emperador Constantino: Constantinopla.
El pintor Thomas Cole interpretó la caída de Roma en este conocido cuadro.
2- Surgimiento del Feudalismo
Uno de los sistemas más característicos de la Edad Media es el feudalismo. Su origen está en los “contratos” que realizaban los emperadores con señores y gobernadores de los diferentes territorios del Imperio, pues dada su vastedad era difícil de controlar. Estos a su vez “contrataban” a otros, por ejemplo a caballeros. Este tipo de relaciones se conocían como vasallaje, es decir, un “contrato” entre hombres libres y que comprometía a ambos: el señor otorgaba al vasallo feudos, honores y cargos, mientras que el vasallo debía a su señor lo que se conocía como auxilium (apoyo militar) y consilium (apoyo y consejo político). El vasallaje no se establecía con una firma como cualquier contrato actual, sino que comportaba toda una ceremonia en la que el vasallo homenajeaba a su señor y el señor lo investía de honores, le nombraba caballero. Un vasallo de un señor podía tener otros tantos vasallos propios (por ejemplo: un caballero era vasallo de un noble y el noble vasallo del rey). Por otro lado estaban las relaciones feudales, del feudo, que se establecían entre el señor del feudo y los siervos que en él habitaban y trabajaban. Eran relaciones desiguales, pero ambos tenían compromisos: el siervo trabajaba para el señor y el señor se comprometía a defenderlo.
- Surgimiento de los monasterios (s. VI en adelante)
Mientras el Imperio se caía a pedazos, unos pocos hombres decidieron alejarse de la violencia de la Edad Media y recogerse en lugares apartados. El monacato no es propio del cristianismo, puesto que se ha manifestado en otras culturas. Sin embargo, los monjes de la Edad Media, tomando el ejemplo de San Benito, tuvieron una muy importante función para sostener y preservar los restos culturales del Imperio Romano desaparecido. Su lema era Ora et Labora (reza y trabaja), y a esto se dedicaban los monjes todo el día. En los monasterios europeos se transcribieron y copiaron obras muy importantes de la actualidad. Estos lugares no solo fueron centros de oración, sino también centros de cultura, germen de lo que serían las universidades modernas. Sin la labor sacrificada de estos hombres no hubiéramos conocido obras como las de Aristóteles, Cicerón, Platón, Virgilio, Ovidio, Horacio…