Qué acciones positivas podría yo realizar como fruto de la Semana Santa
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación paso a paso:
1. Acoger a Jesús en el hogar
Recibir a Jesús en el seno de la familia equivale a “abrirle las puertas, invitarlo a entrar. Saludarlo y presentarle a cada uno de los que estamos compartiendo en este momento en la casa”. Por supuesto, ante el drama que vivimos con el coronavirus, estamos invitados a “confiarle lo miedos que estamos sintiendo y las esperanzas que tenemos, a pesar de la crueldad de la pandemia que estamos sufriendo“.
2. Amar al estilo de Jesús
“Jesús tiene un estilo de amar inconfundible, es muy sensible al sufrimiento de la gente, no puede pasar de largo ante quien está sufriendo”, comenta monseñor Jorge Jiménez, al recordar el mandato del Maestro en la última cena: “que se amen unos a otros como yo los he amado”.
Los gestos de quien ama a Jesús reflejan la bondad del Padre y del propio Jesús: “abraza a los niños de la calle; no quiere que nadie se sienta huérfano; bendice a los enfermos: no quiere que se sientan olvidados por Dios”.
3. Al encuentro de Jesucristo vivo
Ante los reduccionismos de quienes limitan la fe a una emoción, una opinión personal, una receta moral o, incluso, un “tranquilizante”, monseñor Jiménez enfatiza que “la fe es un encuentro con Jesucristo; el cristiano es una persona que se encuentra con Cristo y en Él va descubriendo a un Dios amor que cada día lo convence y lo atrae más”.
4. Permanecer unidos a Jesús
El arzobispo de Cartagena comenta que “ser cristiano hoy exige una experiencia vital de Jesucristo, un conocimiento interior de su persona y una pasión por su proyecto”. Por eso, cuando los cristianos vivimos preocupados y distraídos por muchas cuestiones, es necesario volver a lo esencial: “Lo decisivo en este momento es permanecer en él; aplicar toda nuestra atención al Evangelio. Alimentar en nuestra familia y en nuestras comunidades el contacto vivo con él; no apartarnos de su proyecto”.
5. Orar con nuestra familia
Con la seguridad de que Jesús está en medio de quienes se reúnen en su nombre para orar en familia, monseñor Jiménez recuerda cuatro clases de oración:
“La (oración) de súplica, porque hoy estamos muy urgidos para que El, ‘que puede lograr lo imposible’, pare la pandemia”.
“La de acción de gracias: no nos abandona nunca y ahí está con nosotros hasta el fin del mundo”.
“La de petición de perdón: porque nosotros también perdonamos a quienes nos han ofendido”.
“Y la de alabanza: te bendecimos Señor, porque eres el mejor de los padres”.
6. Confiar en Jesús
Finalmente, el arzobispo de Cartagena anima a confiar en el amor de Jesucristo y en su Palabra, no obstante las angustias y las tribulaciones que experimentamos en estos tiempos. Como dice el canto popular: “Su Palabra me da vida, confío en ti Señor; su Palabra es eterna, en ella esperaré”.