¿ porque se dice que la sociedad civil inspira la solidaridad ?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El surgimiento y extraordinario auge que en los últimos años han conocido los
movimientos de solidaridad en general, y las ongs dedicadas a la cooperación y
desarrollo en particular, ha venido a recordarnos dos ideas fundamentales, que acaso
habíamos dejado caer en el olvido: en primer lugar, que el Estado no tiene el monopolio
de la benevolencia, y en segundo lugar, que la iniciativa privada no puede identificarse a
priori con el interés egoísta.
Con toda seguridad, ambas ideas han contribuido a una general renovación
contemporánea del pensamiento sobre la sociedad civil, proporcionando importantes
claves para una reflexión actualizada sobre su naturaleza1
. Es conocido, en efecto, que
las energías fundamentales de la sociedad civil han sido durante largo tiempo objeto de
recelos y sospechas, porque, no obstante el rechazo inspirado por los excesos del
liberalismo capitalista, se había llegado a compartir su premisa ética primordial: a saber,
que el único motor de la propia acción es el interés privado2
.
A partir de aquí, como es bien sabido, el pensamiento liberal continuaba argumentando
que sería la misma concurrencia libre y pública de tales intereses lo que haría emerger el
bien común, por la acción de una misteriosa “mano invisible”, que tendría la virtud de
arreglar los entuertos sociales, mientras la economía prosperaba en nombre de la
libertad concedida a los individuos3
. A pesar de que esta pretendida armonía dista
mucho de ser obvia, tal y como lo refleja la misma expresión de “darwinismo social”
con la que se caracteriza frecuentemente a los sistemas liberales4
, el neoliberalismo
contemporáneo –lo que se ha venido a llamar “nueva derecha”5
- no ha hecho sino
*
Conferencia pronunciada en el V Seminario de Fundaciones, el 21 de Noviembre de 2000 en la Universidad
de Navarra.
1
Cf. SELIGMAN, A., The idea of civil society, The Free Press, New York, Mac Millan, Inc., 1992. Cf.
Sociedad civil: la democracia y su destino, R. ALVIRA, N. GRIMALDI, M. HERRERO (eds), Pamplona,
1999.
2
Si no en la obra teórica de los representantes del liberalismo ético –comenzando por Adam Smith, padre de
la economía política liberal-, sí en el liberalismo posterior. Cf. BELLAMY, R., Liberalism and modern
society, Polity Press, 1992. 3
Cf. BELLAMY, R., o.c.
4
Una expresión que denota tal vez la realidad social más contradictoria con el ideal de la solidaridad. 5
“La mejor forma de describir las ideas de la nueva derecha es hablar de neoliberalismo, más que de
neoconservadurismo, dado que los mercados económicos cumplen un papel muy importante en ellas. Para los
neoliberales, la empresa capitalista no se considera ya el origen de los problemas de la civilización moderna.
Muy al contrario: es el centro de todo lo que tiene de bueno. Un sistema competitivo de mercado no sólo
aumenta al máximo la eficacia económica, sino que es la principal garantía de libertad individual
Explicación: