porque creen que enriqueta(personaje de la historieta de siri liniers) compara a la literatura con una mentira?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Nació en Buenos Aires en 1973 y pese a que desde muy joven descubrió su vocación de dibujante intentó cumplir con el legado familiar: se inscribió en Abogacía, luego en Ciencias de la Comunicación para más tarde aterrizar en Publicidad.
Pese a que no cumplió con el deseo parental, la tradición se mantuvo ya que el pseudónimo que utiliza para sus obras, y que también es su segundo nombre, remite a su tatarabuelo, virrey del Río de la Plata entre 1807 y 1809, Santiago de Liniers.
Ante la consulta de Marcelo Longobardi sobre qué es realmente ser un historietista, Liniers aseguró que “un historietista es alguien honesto” porque “nadie se pone dibujar historietas diciendo ‘me voy a llenar de guita’ o ‘vienen las chicas’”.
En tal sentido, aseguró: “Es medio como el poeta, nadie publica un libro de poesía pensando cómo vender millones. El dibujante hace lo que tiene que hacer y después somos medio inútiles para funcionar en el mundo comercial, entonces hay muchos esfuerzos que terminan en pequeñas tragedias. Mi trabajo no es dibujar bien, mi trabajo es hacer que el dibujito, esté bien o mal, tenga una especie de vida. A mí viene mucha gente me dice ‘me encanta Mafalda, porque Mafalda es una chiquita de ocho años y dice unas cosas tan geniales’. Y vos decís Mafalda no es una chiquita de 8 años, es un señor de 40 y pico que se estaba quedando pelado, pero está tan bien hecha Mafalda que se separa de Quino y sigue por su lado.”
En la misma línea, Liniers aseguró que si tuviera que darle un consejo a un joven que desea ser artista, le diría “que se case con un abogado pero que no se divorcie porque se queda con los derechos”.
“Macanudo empezó en 2002, yo estaba haciendo Bonjour en Página 12 una vez por semana y me quedaba mucha tinta en el tintero. Y Maitena, que le gustaba Bonjour, insistió mucho en llevarme a La Nación. Le dije que fui varias veces a La Nación y después terminé en la calle de nuevo y a nadie le interesaba lo que muestro y me dice ‘yo te voy a llevar’”, recordó Liniers sobre su más emblemática tira.
explicación:
Qué título le pongo? Yo no me quería casar con un personaje, no quería que sean los pingüinos porque a los tres años iba a ver a los pingüinos… Entonces le puse Macanudo, porque pensé que era la palabra como más feliz y optimista de ese momento. En 2002 el diario era una bola negra que te llegaba a la mañana y qué leías, era durísimo de leer, pero también es verdad que la vida de cada uno de nosotros no es eso, pensé que era lindo que el diario casi por contrato tuviera así que publicar todos los días una palabra como Macanudo al final”, aseguró el dibujante, y completó: “Macanudo es una cosa buena onda que yo siento que estoy llevando el macanudismo el mundo, porque ahora se publica en otros idiomas y conseguí defender Macanudo en todos lados. Publican en checo, en coreano, en italiano, en inglés, estoy descubriendo que Macanudo no es mala palabra en casi ningún lugar salvo en México que tiene una connotación como masculina. Se publica también en El País y la contrató un sindicato americano que se llama King Features, que es como un pool de artistas y ahora distribuyen ellos Macanudo y yo puedo dibujar y no tener que estar pensando”.
Otro de sus personajes clásicos es Enriqueta, quien logró convertirse en el símbolo del #NiUnaMenos. Liniers recuerda cómo fue ese momento: “Me pidieron un dibujito y pensé en los lectores. Es el dibujo más raro de mi carrera, seguramente fue el que repercutió más, tuvo mucha visualización. Lo que los dibujantes pensamos muchas veces es qué es lo que queremos, pero este dibujo cada vez que lo veo es más una cachetada, no algo que me pone contento. Enriqueta tiene un osito en la historieta y yo quería que contraste lo violento de la marcha, de que tengamos que hacer una marcha con esto, con un personaje que siempre lo vemos en un contexto mucho más amable y que todas esas chicas que mueren por femicidio fueron Enriqueta: eran niñitas. Es un dibujo que me da cierto orgullo haber hecho pero que no disfruto nunca cuando me aparece. Tengo tres hijas y estoy preocupado de que me salga esa anti lotería, una persona que alguien que dijo que quería, alguien quiere matarla”.