porque algunos cambios permanecen y otros no en la historia?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación:
la historia como construcción no deja de ser en gran medida
memoria –el deber de la memoria quedará enunciado como una permanente
exhortación a que no olvidemos10- y coincidiremos en que la memoria, como
instrumento de permanencia por medio de la evocación, se comporta con
suma fragilidad. Todos recordamos habitualmente el cambio y no la
permanencia. Siempre la ruptura, nunca la calma en la que nunca pasa nada.
Recordando el cambio preservamos lo permanente porque, al referirnos a
aquél, lo hacemos en relación a este. Cambio y permanencia se apuntalan
mutuamente en la memoria. Para nosotros, sean las transformaciones
radicales o lentas, los cambios marcan hitos sistemáticamente dispuestos en la
línea del tiempo, ese eje cronológico que dibujamos a modo de síntesis del
pasado para conseguir navegar con cierto rumbo por la memoria. Así, nos
parece que la memoria es posiblemente una herramienta fundamental de la
permanencia en la historia11. Lo que no se recuerda no ha sucedido. El olvido
de sus hazañas –recitamos- constituye una segunda muerte para el hombre.
Pero la memoria, y más la colectiva, la que afecta a la historia, especialmente
en nuestros días, tiende a la fragilidad12. Porque la memoria, como simple
evocación, puede ser aleatoria y desde luego escasamente fiable