PORFAVOR NECESITO ESE TEXTO CON TILDE doy corona :
Nuestra asociacion se habia convencido a si misma de que batiriamos todos los records en las competiciones de eslalon, pero las dificultades comenzaron desde el mismisimo momento en que subimos con nuestro lider y guru a aquel flamante autobus con motor diesel. Apenas habiamos recorrido veintiun kilometros ¡cuando nos quedamos sin gasolina en mitad de la autovia! Aun siendo el mas destacado equipo de nuestro barrio, nadie previo cuan complicadas resultarian las cosas en el ambito internacional. Perdimos los esquies y acabamos alquilandoselos a unos señores chiies que pasaban por ahi. Los suecos nos dieron una paliza y los suizos, para que contar. Oscar («Osquitar») Pelaez se fracturo el femur y el coccix y hubo que tratarselos con codeina. El climax se alcanzo cuando los espectadores empezaron a gritar: «¡Que los metan en la carcel!». Si alguna vez esperais cosechar un triunfo en eslalones o similares, no olvideis que no es lo mismo entrenar asiduamente sobre el cesped de casa siguiendo un guion que enfrentarse a un danes, a un leton o incluso al campeon de Roterdam.
Respuestas a la pregunta
Nuestra asociación se había convencido a sí misma de que batiriamos todos los records en las competiciones de eslalon, pero las dificultades comenzaron desde el mismisimo momento en que subimos con nuestro líder y gurú a aquél flamante autobús con motor diésel. Apenas habíamos recorrido veintiún kilómetros ¡cuándo nos quedamos sin gasolina en mitad de la autovía! Aún siendo el mas destacado equipó de nuestro barrio, nadie previó cuán complicadas resultarían las cosas en el ámbito internacional. Perdimos los esquíes y acabamos alquilandoselos a unos señores chiíes que pasaban por ahi. Los suecos nos dieron una paliza y los suizos, para que contar. Óscar («Osquitar») Peláez se fracturó el fémur y el coccix y hubo que tratarselos con codeína. El clímax se alcanzó cuándo los espectadores empezaron a gritar: «¡Que los metan en la cárcel!». Si alguna vez esperáis cosechar un triunfó en eslalones o similares, no olvidéis que no es lo mismo entrenar asiduamente sobre él césped de casa siguiendo un guión qué enfrentarse a un danés, a un letón o incluso al campeón de Roterdam.
Respuesta:
Explicación:
Nuestra asociación se había convencido a si misma de que batiremos todos los récords en las competiciones de slalom, pero las dificultades comenzaron desde el mismo momento en que subimos con nuestro líder y gurú a aquel flamante autobús con motor diesel. Apenas habíamos recorrido veintiún kilómetros ¡cuando nos quedamos sin gasolina en mitad de la autovía! Aun siendo el más destacado equipo de nuestro barrio, nadie previo cuan complicadas resultarían las cosas en el ámbito internacional. Perdimos los esquís y acabamos alquilando celos a unos señores chiíes que pasaban por ahí. Los suecos nos dieron una paliza y los suizos, para que contar. Oscar («Osquitar») Peláez se fracturó el fémur y el cóccix y hubo que tratárselos con codeína. El clímax se alcanzó cuando los espectadores empezaron a gritar: «¡Que los metan en la cárcel!». Si alguna vez esperáis cosechar un triunfo en escalones o similares, no olvidéis que no es lo mismo entrenar asiduamente sobre el césped de casa siguiendo un guión que enfrentarse a un danés, a un letón o incluso al campeón de Rotterdam.