¿Por qué se produce la diferenciación del tuco-tuco?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:Los roedores constituyen el orden más diverso y abundante dentro de los mamíferos neotropicales, distribuyéndose a lo largo de una gran variedad de hábitats. Particularmente, los “tuco-tucos” (nombre que proviene de su vocalización territorial, la cual es similar a un golpeteo “tuc-tuc-tuc”), pertenecientes al género Ctenomys (relacionado con las maras, carpinchos, vizcachas, cuises, entre otros), han “conquistado” el ambiente subterráneo. Se los conoce, además, como topitos, ocultos, tunduques o tucu-tucus y se sabe que constituían unos de los principales alimentos de los pueblos originarios de la Patagonia continental e insular (Pampas, Tehuelches, Onas) y proporcionaban materias primas (como pieles) para elaborar diversas manufacturas (ej. confección de bolsas, cojines, capas). Hoy en día se sabe para algunas especies (ej. C. talarum, C. minutus, C. mendocinus) que su presencia puede tener efectos significativos sobre la composición y dinámica de la vegetación, así como también sobre las propiedades del suelo. Esta influencia sobre distintos aspectos del ecosistema en el cual habitan permite definirlos como bioingenieros ecosistémicos.
Este género se distribuye entre Argentina, Brasil, Uruguay, Bolivia, Paraguay y Perú y habita un amplio rango de ambientes (desde dunas costeras de suelo arenoso, hasta pastizales de altura de suelo compacto). En la provincia de Buenos Aires, se destaca la presencia del tuco-tuco de los Talas (C. talarum) y el tuco-tuco de las dunas (C. australis), ambos asociados a medanos costeros, así como el tuco-tuco de Porteus (C. porteusi), el tuco-tuco de Azara (C. azarae) y el tuco-tuco chasiquense (C. “chasiquensis”), asociados a médanos y ambientes arenosos continentales.
El tuco-tuco es un roedor subterráneo del género Ctenomys, con más de 60 especies exclusivas de Sudamérica. Al pasar la mayor parte de su vida bajo tierra, es más oído que visto: su nombre común es la onomatopeya de su característica vocalización “tuc-tuc-tuc”. A pesar de ser comunes en los ambientes donde viven, son casi desconocidos en cuanto a su taxonomía y biología, y son considerados plaga por los agricultores debido a su mala costumbre de roer mangueras y cables eléctricos.