¿por que santa rosa de lima es prudencia y para que?
Respuestas a la pregunta
La prudencia consiste en evaluar la mejor manera de adecuar principios a circunstancias, estando en conformidad con los ideales normativos de las acciones Siempre estaba dispuesta a ayudar a los pobres, enfermos y esclavos; incluso, compartía lo que tenía con los más necesitados. Laboriosidad: La santa peruana ayudaba en las labores de su hogar, visitaba a los enfermos para atenderlos y apoyaba a sus padres en tareas del huerto y de costura. Es imposible pensar en un 30 de agosto sin relacionarlo con Santa Rosa de Lima, patrona del Perú, de América, de las Indias y de Filipinas. La fiel representante de las enfermeras peruanas y de la policía nacional nació en Lima en 1586 y su verdadero nombre fue Isabel Flores de Oliva, pero su madre comenzó a llamarla ‘Rosa’ cuando descubrió que su rostro lucía sonrosado y poseía una gran belleza a medida que crecía.
Santa Rosa de Lima no fue religiosa, sino laica, de la orden de Santo Domingo. Consagró su vida a Dios desde casa y siempre buscaba imitar a la terciaria dominica Santa Catalina de Siena. Isabel Flores de Oliva se convirtió en la primera mujer americana declarada santa por la Iglesia Católica, al ser canonizada por el Papa Clemente X en 1671. Desde entonces se convirtió en un referente de valores dignos de replicar en el día
Humildad: Santa Rosa de Lima era una joven muy bonita, pero ella no presumía esto, sino que, al contrario, llegaba a despreciar su propia belleza. Además, siempre tuvo una vida sencilla y modesta.
Amor a los pobres: Ella se caracterizaba por su generosidad, solidaridad y compasión. Siempre estaba dispuesta a ayudar a los pobres, enfermos y esclavos; incluso, compartía lo que tenía con los más necesitados.
Laboriosidad: La santa peruana ayudaba en las labores de su hogar, visitaba a los enfermos para atenderlos y apoyaba a sus padres en tareas del huerto y de costura. Ella dedicaba la mayor parte de su día a trabajar, orar y ayudar a los demás.
Oración constante: Rosa nunca dejaba de alabar a Dios, su amor desbordaba y siempre daba fe de las bondades que recibía del Señor. Ella entendía la oración como el comunicarse con el Padre y sentir su presencia, bondad y amor.
Fe incondicional: Isabel Flores de Oliva tenía mucha confianza en la bondad y misericordia de Dios. Ella creía en el perdón de los pecados mediante el sacrificio y la entrega total a los más necesitados.
“Santa Rosa de Lima era una mujer muy entregada a la oración y amiga del Señor desde muy niña. Creció como un lirio entre las espinas.”
Explicación: