¿Por qué Roma fue considerada la cuna de la humanidad? Con argumentos de los historiadores
Respuestas a la pregunta
Roma adquiere un aspecto más y más cosmopolita debido a su gran población transeúnte. Si desde antes era centro de peregrinaciones religiosas (vías romeas) y turísticas, ha sido en la segunda mitad del siglo XX y comienzos del XXI que la presencia de extranjeros ha aumentado en forma exponencial: sus múltiples centros de interés -museos, galerías artísticas, iglesias, monumentos y ruinas antiguas, catacumbas, plazas, villas, edificaciones renacentistas, barrocas y neoclásicas, modernistas, etc- han atraído poderosamente el interés de los visitantes de todas las latitudes y continentes. La industria del turismo sigue siendo una importante fuente de ingresos para la ciudad. Por su parte, la Ciudad del Vaticano atrae a su propia multitud, constituida por creyentes y turistas, presentes en las homilías, en beatificaciones y canonizaciones, o bien visitando sus museos y bibliotecas.
En materia económica Roma se ha consolidado como un centro de industria liviana (textiles, alimentos, productos farmacéuticos, imprenta, etc), se ha convertido en el núcleo de las redes ferroviarias y del sistema de autopistas de Italia. También es el mayor centro financiero de la península. El desarrollo de los servicios y del comercio han venido ocupando a otra buena parte de la población romana. Se destaca su industria cinematográfica, muy activa durante la década de los 50 y 60, con extraordinarios directores -Federico Fellini, Vittorio De Sica, Luchino Visconti, Pier Paolo Pasolini, etc.
La actividad cultural se ha expandido notablemente: la Universidad de Roma se ha posicionado como la mayor de Italia, con casi 150 000 estudiantes. Las actividades artísticas están representadas por sus múltiples academias y teatros. Sus galerías artísticas (p.ej: Borghese, Nacional de Roma) son centros obligados de interés. Por otro lado, han venido proliferando numerosas academias culturales y artísticas, tanto italianas, como pontificias e internacionales.
Tras la represión fascista de la primera mitad del siglo XX, Roma fue, durante los 50 y 60, el epicentro de un estilo de vida desenfadado (principalmente entre los grupos altos adinerados) que ha sido llamado la Dolce Vita (la Dulce Vida), fenómeno expresado en el cine por la película homónima de Federico Fellini (1960) y con la actuación de Marcello Mastroianni. También, durante la posguerra, Roma, en correlación con la abundante ayuda económica de los Estados Unidos, estuvo muy en contacto con las formas culturales de esta nación, relación reflejada, especialmente, en el cine y en las otras artes.
Después de la guerra Roma ha sido elegida como sede por empresas transnacionales e instituciones internacionales, culturales y humanitarias (p. ej., la FAO: Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, el FIDA: Fondo Internacional del Desarrollo Agrícola).
La ciudad fue el escenario histórico en que se creó la Comunidad Económica Europea (CEE) y la Comunidad Europea de la Energía Atómica (EURATOM) mediante la firma de los "Tratados de Roma" (25 de marzo de 1957), suscritos por seis países de Europa Occidental; tales acuerdos fueron el primer gran paso dado por los europeos en pro de su unidad continental. Ambos tratados han sido la base para la actual Unión Europea.
Roma fue también la cuna del Club de Roma (1968), una asociación integrada por científicos, políticos, personalidades, especialistas y organizaciones de distinto ámbito, cuyo objetivo es la creación de un Nuevo Orden Mundial, basado en la propuesta de políticas sustentables y ambientalistas. Este Club ha tenido un importante impacto en el desarrollo de las nuevas corrientes ecologistas y de análisis social.