Por qué percibimos los siguientes estímulos, explica:
a. Dolor cuando nos quemamos
b. La alarma del despertador
c. El aroma del café recién preparado
d. Agrado al degustar los alimentos.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Cada parte de el cuerpo tiene terminaciones nerviosas, cuando éstas son estimuladas, envían una señal electroquímica a nuestro cerebro (esto en milésimas de segundo )
Explicación:
a) Cuando sientes dolor, presión o calor, estos receptores envían señales eléctricas a las neuronas que transmiten el mensaje hasta el cerebro mediante la médula espinal.
b)El oído funciona transformando las ondas sonoras que viajan por el aire en datos que llegan al cerebro y que después se traducen en pensamientos y emociones.
c) Las moléculas del olor en forma de vapor (compuestos químicos) que están flotando en el aire llegan a las fosas nasales y se disuelven en las mucosidades (que se ubican en la parte superior de cada fosa nasal).
Debajo de las mucosidades, en el epitelio olfatorio, las células receptoras especializadas, también llamadas neuronas receptoras del olfato, detectan los olores. Estas neuronas son capaces de detectar miles de olores diferentes.
Las neuronas receptoras del olfato transmiten la información a los bulbos olfatorios, que se encuentran en la parte de atrás de la nariz.
Los bulbos olfatorios tienen receptores sensoriales que en realidad son parte del cerebro que envían mensajes directamente a:
los centros más primitivos del cerebro donde se estimulan las emociones y memorias (estructuras del sistema límbico) y
centros “avanzados” donde se modifican los pensamientos consientes (neocorteza).
Estos centros cerebrales perciben olores y tienen acceso a recuerdos que nos traen a la memoria personas, lugares o situaciones relacionadas con estas sensaciones olfativas
d)El sentido del gusto depende de la estimulación de los botones gustativos, los cuales se encuentran en las papilas gustativas situadas en la lengua, órgano musculoso ubicado dentro de la boca o cavidad oral. El sabor se define como la sensación que causa un alimento u otra sustancia al introducirse en la boca.