¿Por qué los artefactos tecnológicos revolucionaron nuestra forma de vida?
Respuestas a la pregunta
Desde sus orígenes, la especie humana se caracterizó por su habilidad para la elaboración de herramientas y artefactos de diversa índole. A partir de las primeras técnicas para encender fuego, hasta las complejas máquinas del mundo moderno, los seres humanos se han beneficiado de desarrollos técnicos cuya aparición y gradual refinamiento ha marcado profundamente los modos de organización social, así como las tradiciones y el acervo cultural de la civilización.
.Comunicación y expresión.
La forma de comunicar también cambió. La inmediatez del e-mail, allá por 1995, remplazó a las cartas tradicionales, la mensajería instantánea se impuso frente al teléfono. Por su parte, los blogs se convirtieron en un importante medio para contar experiencias y expresar opiniones.
Además, con la aparición del teléfono móvil, con sus SMS, hasta los nuevos Smartphone, pasando por todo tipo de chats con WhatsApp, produjo grandes cambios a la hora de expresarte: reducción del vocabulario empleado para buscar palabras o frases más cortas, abreviación de palabras, un abuso del uso de signos para dar énfasis y la introducción de símbolos, iconos o GIFs para sustituir o acompañar el texto.
.Relaciones interpersonales.
El correo electrónico, los SMS, la mensajería instantánea, las llamadas telefónicas, las redes sociales o el microblogging brindaron la oportunidad de relacionarse con otras personas sin necesidad de estar físicamente presentes. En esa línea, el experto en tecnología afirmó que el 86 por ciento de los internautas de entre 16 y 65 años utiliza las redes sociales. “Hoy por hoy una de las aplicaciones más consumidas es WhatsApp al igual que Facebook e Instagram. En promedio un argentino pasa entre 2 a 5 horas en las redes”, detalló Talavan.
.El trabajo y formación.
El trabajo ya no es un lugar físico, sino una actividad que puedes hacer en cualquier momento y lugar. Los dispositivos móviles y las nuevas tecnologías de colaboración como la videoconferencia, permiten que los equipos de trabajo interactúen con una enorme facilidad y naturalidad, como si estuvieran reunidos en la misma sala aunque se encuentren a miles de kilómetros de distancia.