¿Por que las grandes potencias europeas pierden sus colonias?
Respuestas a la pregunta
Para empezar:
¿Cuales fueron las grandes potencias de Europa?
Cinco Grandes Potencias en Europa:
El Imperio austríaco (más tarde Austria-Hungría),
El Imperio británico, la Francia imperial (más tarde la tercera República francesa),
El Reino de Prusia (más tarde el Imperio alemán)
El Imperio ruso.
Respecto a la pregunta:
¿Por que las grandes potencias europeas pierden sus colonias?
Si Austria-Hungría abrió la caja de Pandora en los Balcanes, especialmente durante el periodo 1908-1914 con su terca oposición a Serbia —que instrumentó con la anexión de Bosnia (1908) y la creación del estado independiente de Albania tras la Conferencia de Londres (1913)— todo con el objeto de aislarla, lo hizo a sabiendas de que eran los cimientos de un enfrentamiento con el Imperio ruso del zar y con todas las probabilidades de desatar la conflagración mundial.
Escogieron doblar la apuesta para tratar de minimizar las pérdidas; un riesgo que estimaron, junto a los alemanes, más sensato que permitir que se vaciaran sus bolsillos con la disgregación de sus territorios, y lo que ocurrió es que saltó la banca: sólo cobrarían con la victoria total. El resto es ya parte del consabido relato de la crisis de Sarajevo, que acabaría por dinamitar el resto de irresponsabilidades, ambiciones y proyectos de hegemonía, coloniales y europeos, que albergaban no sólo rusos, austríacos y alemanes, sino también turcos, británicos y franceses.
En un sentido estricto, los imperios borrados del mapa de un plumazo tras el desastre de la Gran Guerra fueron, como es lógico, los de los perdedores: el Imperio alemán, el Austro-Húngaro y el Otomano, además de la Rusia zarista, que ni siquiera terminó la guerra, antes de desmoronarse tras la revolución Bolchevique de 1917. Un caso singular, porque trocaron un imperio por otro: una vez que se deshizo la pretendida internacionalización de la revolución obrera, del imperio zarista pasaron al soviético. A partir de los años 30 Moscú no buscó la replicación de su revolución; cuando su expansionismo no ocupó directamente los países a su alcance, los controló con gobiernos títeres.