por qué fue importante la participación de los Monteros en la independencia del Perú
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Montoneros fue una organización guerrillera peronista de Argentina, surgida en la década de 1970 durante la dictadura autodenominada Revolución Argentina. Al crearse, todos los partidos políticos habían sido prohibidos, el propio Juan D. Perón permanecía exiliado y estaban surgiendo -al influjo de la Revolución cubana-, tanto en Argentina como en otros países de América Latina, otras organizaciones guerrilleras y «movimientos de liberación nacional», en un contexto insurreccional caracterizado por decenas de puebladas entre las cuales el Cordobazo de 1969 fue la más paradigmática. Montoneros declaraba que su objetivo era luchar contra la dictadura gobernante, lograr el retorno de Perón al país, la convocatoria a elecciones libres y sin proscripciones, el establecimiento de un socialismo nacional,[2] al que consideraba una evolución natural del peronismo, conjugando un Estado socialista con las características propias de la cultura argentina y latinoamericana.
Explicación:
Su primera acción pública se realizó el 29 de mayo de 1970, con el secuestro, posterior juicio revolucionario y asesinato del exdictador antiperonista Pedro Eugenio Aramburu, uno de los líderes del golpe de Estado que en 1955 había derrocado al gobierno constitucional liderado por el presidente Juan Domingo Perón. Montoneros secuestró al exdictador para someterlo a «juicio revolucionario» por traidor a la patria, haber fusilado a 27 personas para reprimir el levantamiento de Valle en 1956, y para recuperar el cadáver de Eva Perón que Aramburu había secuestrado y hecho desaparecer.[3][4][5]
Montoneros fue el núcleo armado de un conjunto de organizaciones sociales no militares ("frentes de masas") conocido como la Tendencia Revolucionaria del Peronismo, o simplemente «La Tendencia», que incluyó a la Juventud Peronista Regionales (JP), la Juventud Universitaria Peronista (JUP), la Juventud Trabajadora Peronista (JTP), la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), la Agrupación Evita y el Movimiento Villero Peronista.
En 1972 se fusionó con Descamisados y en 1973 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), con las que venía actuando en conjunto. Sus acciones contribuyeron a que la dictadura militar convocara a elecciones libres en 1973, en las que venció el frente electoral multipartidario que integraba (Frejuli), con la candidatura presidencial del peronista Héctor José Cámpora, hombre cercano a Montoneros, al igual que varios gobernadores, parlamentarios, ministros y altos funcionarios del gobierno.[6] El gobierno de Cámpora y su relación con Montoneros fue objeto de fuertes presiones desde un inicio, desde sectores de derecha y la logia anticomunista italiana Propaganda Due, y apenas 49 días después debió renunciar, luego de la masacre de Ezeiza.[7] A partir de ese momento Montoneros comenzó a perder poder y a verse progresivamente aislado, situación que se agravó luego del asesinato del líder sindical José Ignacio Rucci el 25 de septiembre de 1973 -atribuido a la organización- y sobre todo después de la muerte de Perón, el 1 de julio de 1974, cuando se desató una política de terrorismo de Estado llevada adelante por la organización parapolicial de extrema derecha denominada Triple A. Dos meses después, Montoneros decidió volver a la clandestinidad y reiniciar la lucha armada.[8] El 8 de septiembre de 1975, la presidenta María Estela Martínez de Perón dictó el Decreto No. 2452/75 prohibiendo su actividad y calificándola como «grupo subversivo».
El 24 de marzo de 1976, fue derrocado el gobierno constitucional, estableciéndose una dictadura cívico-militar antiperonista, que impuso un régimen sistemático de terrorismo de Estado y aniquilamiento de opositores. Montoneros estableció su conducción en México y combatió a la dictadura, causando serias bajas al gobierno cívico-militar y sufriendo igualmente fuertes pérdidas, entre ellas gran cantidad de militantes y combatientes desaparecidos. En 1979 y 1980 intentó dos contraofensivas que fracasaron militar y políticamente. Desde ese momento su organización se fue disgregando progresivamente. Al recuperar la democracia en diciembre de 1983, la organización Montoneros ya no existía como estructura político militar y buscó insertarse en la vida política democrática, dentro del peronismo, bajo la denominación de Juventud Peronista, bajo el liderazgo de Patricia Bullrich y Pablo Unamuno, sin llegar a conformar una organización política autónoma.[9] En los años siguientes, varios adherentes a Montoneros ocuparon cargos políticos de importancia en los gobiernos democráticos.