por que comenzaron a formarse organizaciones armadas
Respuestas a la pregunta
Respuesta: hay esta me das
coronita
Explicación: Desde mediados de la década del cincuenta hasta la última dictadura militar, la Argentina
vivió un proceso de creciente conflictividad social e inestabilidad política. El período
estuvo signado por la convergencia de diversas crisis, tanto debido al agotamiento de su
régimen de acumulación como a la crisis de legitimidad que atravesaron sus instituciones
democráticas tras la proscripción del peronismo. La falta de resolución de esta situación
no sólo produjo el descrédito del sistema de partidos, que contrastaba con el poder de
grupos de presión como las Fuerzas Armadas, los sectores empresarios y los sindicatos;
sino que derivó en serios cuestionamientos y rupturas en diversas organizaciones e
instituciones de la sociedad civil. Todo ello generó transformaciones significativas en las
orientaciones y prácticas políticas de actores sociales preexistentes y también la
emergencia de otros nuevos.
En el caso de los partidos y agrupaciones de izquierda -como también de grandes
contingentes de la clase media-, uno de los elementos centrales fue el replanteo de la
caracterización del peronismo dada su persistencia como identidad política de la mayoría
de los sectores trabajadores. Este proceso se vio complejizado por el impacto de la
Revolución Cubana, que reinstaló el tema de la revolución en la agenda de una izquierda
hasta entonces apegada a concepciones gradualistas y a la utilización de medios
parlamentarios y legales en la lucha política (Tortti 1999a, 2009). Profundos procesos de
transformación y radicalización tuvieron lugar también en diversos sectores del
movimiento peronista (James, 1999; Raimundo, 2000; Bozza, 2001) y de los cristianos,
que de la crítica de las estructuras eclesiásticas pasaron progresivamente a la
impugnación del sistema social (Morello, 2003; Sarlo, 2001a). En este contexto, y
particularmente desde el “Cordobazo” de 1969, se abrió en el país un período de
cuestionamiento generalizado que se manifestó en los más variados ámbitos de la
sociedad civil (Portantiero, 1977; O’Donnell, 1982; Cavarozzi, 2002; Gordillo, 2003). Por
entonces, amplios sectores de la clase trabajadora, el campo cultural, la iglesia y el
movimiento estudiantil protagonizaron un intenso proceso de politización que, junto con la
emergencia del activismo armado, dio lugar a un heterogéneo conglomerado de fuerzas