Por favor ayúdenme una décima con 10 versos y 8 sílabas de chile
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
la verdad no se si es de Chile pero bueno..
DECIMAS DE AMOR
Amor: avidez errante,
torbellino incontenible,
esencia de lo terrible
en incendio alucinante.
Con tu codicia incesante
en mí vives arraigado
y exiges que, enamorado
me entregue cuando me doy.
Amor: ¿no sabes que estoy
sólo de ti enamorado?
Eres, amor: sed y anhelo,
hambre, delirio, locura,
azúcar de la amargura
y amargura del desvelo.
Eres infierno, eres cielo,
la esperanza enardecida,
el desangre sin herida,
lo que nos forma y deshace.
Eres la muerte que nace
continuamente en la vida.
Amor: has amado tanto
y sin embargo te siento
férvido, puro, sediento,
sin decepción ni quebranto.
No te mina el desencanto
por lo que has sufrido ya,
ni te importa si será
mentira lo venidero:
porque eres como el venero
que existe por lo que da.
Amor, inaudita hoguera
e la entraña del invierno
de mi vida, atroz infierno:
¡cómo crecerte quisiera!,
mas sin dicha y sin espera
a mi muerte me adelanto
y preso en el desencanto
es mi corazón senil:
hielo en martirio febril
descongelándose en llanto
Respuesta:
Tesorito tan querido.
El alma, mi bien, te di
¿Qué diré al que me la dio?
Diré que se me perdió
Solo por quererte a ti.
Podrá un falso caballero
O algún poderoso rey
Faltar al amor y ley,
Ofreciendo el mundo entero.
Más en esto soy certero
Yo que tanto padecí.
Eres la reina de mí
Cuerpo, corazón y mente
Porque esperando paciente
El alma, mi bien, te di.
Con cariños y paciencia
Te adoro reina de amores
La más bella de las flores
Que me adorna la existencia.
¿Me tendrá el Señor clemencia
siendo él quién me creó?
¿Qué excusa inventaré yo
al poderoso Increado?
¿Si mi alma te he entregado
qué diré al que me la dio?
Siempre estarás en mi pecho
Si me queda algo de vida
Y espero que en mi partida
Estés cerca de mi lecho.
Por un camino derecho
Que la luz iluminó;
Juntos iremos los dos,
Nunca perdiendo la calma,
Si preguntan por mi alma
Diré que se me perdió.
Habiéndote ya elegido
Todo en mi vida es festejo,
Mientras te hago los cortejos
Tesorito, tan querido.
Todo recobra sentido,
Se hace claro para mí.
Nunca había querido así
Con tanta felicidad
Me siento lleno, en verdad
Solo por quererte a ti.
(Gabriel Huentemil Ortega.
Payador, narrador oral, cantor a lo poeta e intérprete de guitarrón chileno.)