popol vuh porque los primeros creadores mayas mayas decidieron crear a los animales
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[ La creación de los animales ]
El Popol Vuh, o "Libro del Consejo", escrito en lengua mayaquiché con el auxilio de caracteres latinos en el siglo xvi, fue encontrado originalmente en las altiplanicies de Guatemala. Este libro, de absoluta autenticidad, nos proporciona información sobre cosmogonía, religión, mitología, emigración y la historia de los mayas quichés, cuyos descendientes todavía viven en la misma región. Su contenido es frecuentemente muy simbólico e incluso contradictorio.
LA PRIMERA NARRACIÓN
Esta es la narración de cómo todo quedó en suspenso, en calma, en silencio; todo estaba inmóvil, mudo, y el cielo estaba vacío en toda su extensión. Esta es la primera narración, el primer discurso. No había aún ni un hombre, ni un animal, ni aves, ni peces, ni cangrejos, árboles, piedras, cavernas, barrancos, hierbas ni bosques; sólo existía el cielo. No se manifestaba la faz de la tierra. Sólo existía el mar y su calma y el cielo en toda su extensión. No había nada reunido, nada que hiciese rumor; ninguna cosa se movía, se agitaba o hacía rumor en el cielo. No había nada que estuviese en pie; sólo el agua en reposo, el mar pacífico, solo y tranquilo. No había nada que tuviera existencia. Solamente había inmovilidad y silencio en la oscuridad, en la noche. Solamente el Creador, el Formador, Tepeu, Gucumatz, los Progenitores, que estaban en el agua rodeados de claridad. Se escondían bajo plumas verdes y azules y por eso se llamaban Gucumatz.
LA CREACIÓN DE LOS ANIMALES
Después hizo los animales pequeños del monte, los guardianes de todos los bosques, los genios de la montaña, los ciervos, las aves, leones, tigres, serpientes, culebras, víboras, guardianes de las lianas. Y dijeron cuando meditaron y poco después hablaron. En ese momento fueron creados los ciervos y las aves. Inmediatamente asignaron a los ciervos y a las aves sus respectivas moradas. "Tú, ciervo, dormirás en las llanuras de los ríos y en los barrancos. Allí estarás entre los espinos, entre las hierbas; en el bosque os multiplicaréis, marcharéis y os sostendréis sobre cuatro patas. Y así como fue dicho, así fue hecho". Después designaron también la morada de los pajaritos y de las aves mayores: "Vosotros, pájaros, habitaréis en los árboles y en las lianas, allí haréis vuestros nidos, allí os multiplicaréis, allí os balancearéis, entre las ramas de los árboles y de las lianas". Así se dijo a los ciervos y a los pájaros a fin de que hicieran lo que debían hacer, y todos se encaminaron a sus moradas y a sus nidos. De este modo los Progenitores dieron las respectivas moradas a los animales de la tierra.
Pero no se pudo lograr que hablasen como los hombres; únicamente silbaban, cloqueaban y graznaban; no se manifestó la forma de su lenguaje, y cada cual gritaba de modo diferente. Cuando el Creador y el Formador vieron que no era posible que hablasen, se dijeron entre sí: "No ha sido posible que aquellos digan nuestro nombre, el de nosotros, sus creadoras y formadores. Esto no está bien", dijeron entre sí los Progenitores. Entonces les dijeron: "Seréis cambiados porque no se ha logrado que habléis. Hemos cambiado de parecer: vuestra comida, vuestro pasto, vuestra morada y vuestros nidos los mantendréis, serán las quebradas y los bosques, porque no se ha podido conseguir que nos adoréis y nos invoquéis. Sin embargo, hay quien nos adora, haremos otros (seres) que sean obedientes. Vosotros, aceptad vuestro destino; vuestras carnes serán comidas. Así será. Tal será vuestra suerte". Así dijeron cuando hicieron saber su voluntad a los animales pequeños y grandes que hay sobre la faz de la tierra.
Después quisieron intentar nuevamente la suerte; quisieron hacer otra tentativa y quisieron probar de nuevo a que se les adorase. Pero no pudieron comprender el lenguaje que empleaban entre sí, nada pudieron obtener y nada pudieron hacer. Por este motivo fueron inmoladas sus carnes, y fueron condenados a ser comidos y muertos los animales que existen sobre la faz de la tierra. Así, pues, sucedió que se hizo una nueva tentativa de crear y formar el hombre por parte del Creador, del Formador y de los Progenitores.
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