poemas de 5 estrofas escritos por poetas (no por ustedes, por poetas
Respuestas a la pregunta
Si tú me miras, yo me vuelvo hermosa
como la hierba a que bajó el rocío,
y desconocerán mi faz gloriosa
las altas cañas cuando baje el río.
Tengo vergüenza de mi boca triste,
de mi voz rota y mis rodillas rudas.
Ahora que me miraste y que viniste,
me encontré pobre y me palpé desnuda.
Ninguna piedra en el camino hallaste
más desnuda de luz en la alborada
que esta mujer a la que levantaste,
porque oíste su canto, la mirada.
Yo callaré para que no conozcan,
mi dicha los que pasan por el llano,
en el fulgor que da a mí frente tosca
y en la tremolación que hay en mi mano...
Es noche y baja a la hierba el rocío;
mírame largo y habla con ternura,
¡que mañana al descender al río
la que besaste llevará hermosura!
De..Gabriela Mistral"
Respuesta
Lima limpia
Nicomedes Santa Cruz (1958-1991)
Como aporte voluntario
al ornato y sanidad
rogamos al vecindario
que no ensucie la ciudad.
Y dice así:
Señora y ama de casa,
se lo pido con finura:
saque el tacho de basura
a la hora que el camión pasa,
o antes, pues si se retrasa,
los perros del vecindario
ensuciarán todo el barrio
hurgando los desperdicios.
Le pedimos tal servicio
como aporte voluntario.
Señor automovilista,
en su raudo anonimato
ensucia usted sin recato
las veredas y la pista:
pero yo tengo una lista
de su imputabilidad:
colillas en cantidad,
cajetillas, envolturas…
No atente con sus basuras
al ornato y sanidad.
Y usted, joven colegial,
que de la Escuela a su casa
va dejando donde pasa
un horrendo basural:
la limpieza es tan vital
que el propio abecedario.
Y por ser tan necesario
que haya más limpieza en Lima,
por conducto de esta rima
rogamos al vencindario:
Que quede como un anís
cada calle, cada esquina.
Que la limpieza de Lima
se extienda a todo el país.
Que en Londres, Roma o París
nos envidien en verdad…
Esto será realidad
cuando entre todos nosotros
vigile un vecino al otro
que no ensucie la ciudad.
(1966)