poema de aurelio espinosa polit
Respuestas a la pregunta
SOLEDAD
Ley de lo que es y ha sido, ley de lo que será:
soledad en la vida, y en muerte, soledad.
Vivir es cruzar solo el agostado erial,
y ver como fantasmas tantos que al lado van.
Es prestar el oído con atención falaz,
porque la voz que se oye no es la que hablando está.
Es palpar la neblina renaciente y fugaz
que en torno de cada alma espesa su cendal;
y saber que no pueden ni bondad ni maldad
más que rozar de fuera sin nunca penetrar.
Saber que compartimos superficies no más,
y sentir la distancia en toda intimidad.
Saber que las heridas donde es íntimo el mal
o ellas solas se curan o quedan sin curar;
que podemos amarnos con serena verdad,
sin que el amor descubra paso al ajeno umbral,
sin que, huésped iluso, logre encontrar jamás
la alcoba sin cortinas o con fuego el hogar...
Y es que intacto se yergue el problema esencial,
que no dice «nosotros» sino «yo»—y es verdad.
Un alma. Un fallo único, fallo sin paso atrás.
Escoge sola, y sola entra en su eternidad.
Nadie dirá por otro el sí o el no fatal.
Si la elección es libre es que a solas será.
Brotes de un mismo tallo: libertad, soledad.
Sin libertad no hay hombre, sin soledad no le hay.
Perspectiva enlutada, perspectiva veraz:
no es calumniar la vida de inicua o de brutal;
es recibirla en calma tal corno Dios la da:
la vida cual la muerte, ambas en trance impar.