personajes de la biblia que no dominaron sus sentimientos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1. Jesús
Después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, Jesús fue tentado por el diablo tres veces, lo cual muestra que seremos tentados de la misma manera al creer en Jesús y al seguirlo. La primera tentación de Jesús fue del punto más débil de los hombres, la comida. Jesús venció la primera tentación con estas palabras: “No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”. La segunda tentación fue de probar el poder de Dios. Jesús venció al diablo con estas palabras: “No tentarás al Señor tu Dios”. La tercera tentación fue de riqueza y gloria del mundo a cambio de adorar a Satanás. Jesús venció al diablo diciendo: “Vete, Satanás, porque escrito está: Al señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás”. La victoria de Jesús ante tales tentaciones de Satanás es un ejemplo para nosotros de que podemos vencer cualquier tentación y que debemos vencerla (Mt. 4:1-11).
2. Job
Satanás dio muchas pruebas para tentar a Job que creía firmemente en Dios. Ya que Dios había permitido al diablo probar a Job con dificultades, Job perdió todos sus bienes e, incluso, a sus hijos; y también fue herido con una sarna maligna desde la planta del pie hasta la coronilla de la cabeza. Además, aun su mujer le dijo: “Maldice a Dios, y muérete”. Job, sin embargo, no abandonó su fe, sino que la guardó firmemente, teniendo paciencia hasta el fin. De esta manera, Dios derramó grandes bendiciones sobre él porque superó las tentaciones, y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job. Y tuvo hermosos hijos e hijas. En consecuencia, Job pudo vivir sirviendo a Dios y teniendo más felicidad y bendición que antes.
3. José
Los hermanos de José lo envidiaron y lo enviaron a Egipto adonde fue como esclavo a Potifar, uno de los oficiales de Faraón y capitán de la guardia. En ese momento, una gran tentación llegó a José. La esposa de Potifar vio que José era fuerte y de buen parecer y lo tentaba cada día (Gn. 39:7-10). No obstante, José pensó en Dios y no cayó en la tentación. Asimismo, José venció la tentación de Satanás pensando solamente en Dios, y se convirtió en gobernador de Egipto con la ayuda de Dios, y pudo salvar a sus padres y a sus hermanos (Gn. 41:40-43).
4. El apóstol Pablo
Cinco veces el apóstol Pablo recibió cuarenta azotes menos uno, por haber estado predicando el evangelio, una vez apedreado, una noche y un día como náufrago; estuvo en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de su nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en la tierra, peligro entre falsos hermanos, en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez (2 Co. 11:23-28). Aun bajo estas tentaciones tan difíciles, Pablo guardó la fe y concluyó su misión de predicar el evangelio hasta el final, por lo que pudo obtener la corona de la justicia reservada en el reino de los cielos (2 Co. 11:23-28).
5. Daniel
Daniel recibió la amenaza y tentación de que sería echado al foso de los leones si oraba a otro excepto al rey. Pese a esto, oraba tres veces al día con la ventana abierta hacia Jerusalén. Como resultado, fue echado al foso de los leones por violar la orden del rey. Pero fue protegido y salvo en medio de los leones por la ayuda de Dios. A través de esto, mostró la gloria de Dios grandemente ante muchas personas (Dn. 6:1-28).
6. Sadrac, Mesac y Abed-nego
Sadrac, Mesac y Abed-nego, los tres amigos de Daniel, fueron amenazados con ser echados dentro de un horno de fuego ardiendo si no se postraban y adoraban la imagen de oro. Pero ellos nunca la adoraron, manteniendo firme su fe hasta el final. Finalmente fueron echados dentro del horno calentado siete veces más de lo acostumbrado, pero el fuego no tuvo poder alguno sobre sus cuerpos, ni aun el cabello de sus cabezas se quemó, y ni siquiera olor de fuego tuvieron cuando salieron del fuego. Nabucodonosor rey de Babilonia y sus sátrapas y consejeros se sorprendieron y se arrepintieron ante Dios. Además, Sadrac, Mesac y Abed-nego obtuvieron puestos más importantes en la provincia de Babilonia (Dn. 3:1-30).
Hay fuerzas malignas que obstaculizan nuestra fe y nos impiden seguir la voluntad de Dios también en esta época. No obstante, debemos guardar nuestra fe en Dios como los antepasados en la Biblia, que recibieron grandes bendiciones después de guardar su fe incluso en grandes dificultades hasta el final y entraron en el reino de los cielos.
Explicación:
dios te bendiga