pasión , muerte y resurrección de nuestro señor Jesucristo
AYUDAAAAAA
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
En la Pasión y Muerte del Señor se cumplieron todas las profecías sobre el Mesías Salvador, pero además se descubre, como no lo había sido hasta entonces, el amor de Dios por los hombres. El relato de la Pasión no se puede separar del de la Resurrección porque Cristo va a triunfar.
Explicación:
Respuesta:
Según la religión cristiana, la pasión de Cristo, también llamada la pasión de Jesús, se refiere a la agonía y sufrimiento que Jesús de Nazaret padeció desde su oración en el huerto de Getsemaní (justo antes de ser capturado) hasta su muerte en la cruz.
- San Juan fue el único apóstol que acompañó al Señor en sus últimas horas. En el final de su Evangelio cuenta lo que vio. Ofrecemos esos pasajes evangélicos en audio: el prendimiento de Jesús; el juicio de Pilatos; la crucifixión y muerte de Jesús; y, la resurrección de Cristo
Para ubicarnos en los días en que sucede la muerte de Jesús, debemos recordar lo que significa la Fiesta de Pascua que celebraban los judíos cada año, y que Jesús y sus Apóstoles que eran judíos, también celebraban. ¿Quién recuerda el origen y el motivo de la celebración de la Fiesta de Pascua?
Era la conmemoración de la salida de Egipto del pueblo de Israel, cuando Yahvé los sacó de la opresión del Faraón con toda clase de milagros y prodigios, entre tantos, el paso por el Mar Rojo.
Y recordemos que Yahvé le dio instrucciones muy precisas y solemnes al su Pueblo a través de Moisés de celebrar esta fecha todos los años.
Explicación:
Jesús anuncia a sus Apóstoles su Pasión, Muerte y Resurrección:
Pocos días antes de la Fiesta de la Pascua, Jesús dijo a los doce Apóstoles: Vamos a subir a Jerusalén. Allí me entregarán en manos de los sumos sacerdotes y de los doctores de la Ley. Me condenarán a muerte y me entregarán a los Romanos. Ellos se burlarán de Mí, me escupirán, me azotarás y me matarán. Pero, a los tres días, Yo resucitaré. (Mc. 10, 32-34)
Judas, uno de los Apóstoles, traiciona a su Señor: Dos días antes de la Fiesta de Pascua se reunieron los sumos sacerdotes y los doctores de la Ley. Desde hace tiempo buscaban una ocasión para apresar a Jesús y matarlo. Uno de los doce Apóstoles, Judas Iscariote, fue a los sacerdotes y les dijo: Estoy dispuesto a entregarles a Jesús. A ellos les encantó oír esto y le prometieron una buena recompensa: treinta monedas de plata. Desde aquel momento, Judas buscaba la ocasión para entregar a Jesús. (Mc. 14, 1-2 y 10-11)
Finalmente, se levantó y volvió a donde estaban sus discípulos. Pero los Apóstoles dormían. Jesús les dijo: ¿Por qué duermen? Estén dispuestos y oren para resistir la prueba que ha de llegar.
todavia estaba Jesús hablando con ellos, cuando unos hombres entraron
Jesús ante Pilato: Los jefes del pueblo llevaron a Jesús ante el Gobernador Romano: Poncio Pilato, porque era el que tenía autoridad para mandarlo a matar. Le acusaron: Este hombre está alborotando al pueblo. Afirma que El es el Salvador, el Rey. Pilato preguntó a Jesús: ¿Tú eres Rey? Jesús contestó: Mi Reino no es de este mundo. Si así fuera, mis servidores habrían luchado por defenderme. Yo soy Rey y he venido al mundo para dar testimonio de la Verdad. Todo el que se interesa por la verdad escucha lo que Yo digo. Entonces Pilato preguntó: ¿Qué es la Verdad?
Pilato dijo a los que acusaban a Jesús: No veo ninguna razón para declararlo culpable. Todos los años, en Pascua, concedo la libertad a un preso. ¿Indultaré este año al Rey de los Judíos? Contestaron a gritos: ¡No, a Jesús no! ¡Indulta a Barrabás! Barrabás era un bandido. Pero Pilato dejó en libertad a Barrabás y ordenó que azotaran a Jesús, a ver si los acusadores de Jesús se conformabancon ese castigo. los soldapara burlarse- tejieron una coronados romanos, no sólo lo azotaron, sino que – de espinas y la colocaron brutalmente sobre la cabeza de Jesús. Luego le echaron sobre los hombros un manto rojo y se burlaban de El: ¡Ave, Rey de los Judíos! Y, además, le daban bofetadas. Pilato presentó a Jesús a sus acusadores y les dijo: Miren, miren a este Hombre. Pero ellos gritaban más duro: ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo! Pilato dijo: Yo no encuentro ninguna razón para condenarlo. Pero ellos le replicaron: Ha dicho, refiriéndose a sí mismo, que es el Hijo de Dios. Y estuvieron amenazando a Pilato de acusarlo con el Emperador romano, hasta que éste tuvo miedo y condenó a Jesús a morir en la cruz. (Jn. 18, 28 a 19, 16).
no se que hise pero espero te ayude