¿para qué sirve el material biocompatible?
Prótesis total de cadera
La solución para este tipo de fracturas y enfermedades como la artritis, entre otras, puede ser una prótesis total de cadera vista en la parte b).
El reemplazo de rodilla es uno de los avances más importantes en la cirugía ortopédica y se realizó por primera vez en 1968.
Válvulas cardíacas
El corazón es una parte vital de la anatomía humana, porque es una bomba de recirculación de la sangre a través del cuerpo. Las válvulas cardíacas permiten que el corazón bombee la sangre eficientemente.
La aparición de los implantes dentales ha influido en importantes cambios en la odontología clínica de la segunda mitad del siglo XX. Mediante técnicas quirúrgicas específicas, es posible sustituir las piezas dentales perdidas por piezas sintéticas, con las mismas funciones y de larga duración.
El primer procedimiento quirúrgico para una hernia de disco torácico fue reportado por Middleton y Teacher en 1911. Desde la década de 1930 hasta la actualidad, se ha utilizado material metálico en prótesis en cirugías.
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Un biomaterial o material biocompatible aplicable es un material de origen sintético u orgánico utilizado para crear dispositivos capaces de sustituir una parte de un sistema vivo o para funcionar en contacto directo con tejido vivo fiable, biocompatible y económicamente seguro.
En términos médicos, un biomaterial es un compuesto farmacológicamente inerte diseñado para ser implantado o incorporado en el sistema vivo. En ese sentido, el biomaterial se implanta para reemplazar o regenerar los tejidos vivos y sus funciones.
Respuesta:
Un biomaterial o material biocompatible aplicable es un material de origen sintético u orgánico utilizado para crear dispositivos capaces de sustituir una parte de un sistema vivo o para funcionar en contacto directo con tejido vivo fiable, biocompatible y económicamente seguro.
En términos médicos, un biomaterial es un compuesto farmacológicamente inerte diseñado para ser implantado o incorporado en el sistema vivo. En ese sentido, el biomaterial se implanta para reemplazar o regenerar los tejidos vivos y sus funciones.
De hecho, hay muy pocos materiales biocompatibles que sean aceptados por todos los cuerpos, por lo que un material no puede ser clasificado como tal definitivamente. Algunos de los materiales biocompatibles más comunes son el titanio para implantes o el acero.
La biocompatibilidad puede interpretarse como el grado de “aceptabilidad biológica”, que a su vez constituye el estudio de la interacción de los biomateriales con los tejidos que pueden estar en contacto con ellos. La aceptabilidad biológica puede ser examinada en varios niveles de interacción:
La interacción entre el material y los tejidos.
La reacción resultante de la degradación del material.
Factores, elasticidad mecánica, tenacidad, propiedades tribológicas entre otros.
La interacción puede hacerse tanto desde el implante al tejido como viceversa. Cualquier riesgo biológico que pueda resultar del uso de biomateriales depende de una serie de factores, incluyendo el uso, la frecuencia, la duración de la exposición, la cantidad o la identidad de las sustancias migradas al cuerpo humano, así como la actividad biológica de dichas sustancias.
Clasificación de Biomateriales
1. Según su fuente:
Natural
Autólogo: se obtiene del mismo individuo que recibirá el injerto.
Aloinjerto: de otro individuo y no del que recibirá el injerto.
Xenoinjerto: de una especie distinta de la humana.
Sintéticos
2. Según su papel biológico:
Tóxico
Bio-inertes: no hay interacción con el cuerpo, pueden permanecer largos periodos de tiempo en un ambiente fluido altamente corrosivo. Generalmente se utilizan para implantes permanentes, cirugía maxilofacial y craneal. Ejemplos: titanio, cromo cobalto y sus aleaciones o alúmina, circonio y óxido de magnesio.
Bioactivo: participa activamente en la reparación de tejidos. Se utilizan para implantes dentales y prótesis ortopédicas. Ejemplos: hidroxiapatita de alta densidad, compuestos de titanio, vidrios bioactivos y algunas cerámicas vítreas.
Bio-resorbible: se reabsorbe y aporta los elementos necesarios para la reparación de los tejidos.
3. Por su tiempo de uso y funcionamiento:
Temporal
No reabsorbibles (supuestamente eliminados) o biodegradables
Permanente
4. Por su composición:
Cerámica: tienen buena biocompatibilidad, resistencia a la corrosión e inercia química. Sin embargo, presentan problemas con altos esfuerzos de impacto, son inelásticos, tienen alta densidad y son difíciles de producir. Algunos ejemplos son el óxido de aluminio, los aluminatos de calcio, los óxidos de titanio y algunos carbonos.
Polímeros: tienen la ventaja de ser elásticos, de baja densidad y fáciles de fabricar. Su principal desventaja es la baja resistencia mecánica y la degradación en el tiempo. Algunos ejemplos son el teflón, el nylon, el dacrón y las siliconas.
Metales y aleaciones: tienen alta resistencia al impacto y al desgaste. Sin embargo, son de baja biocompatibilidad, viables para ser corroídos en medios fisiológicos, alta densidad y dificultad para lograr la conexión con tejidos conectivos blandos.
Composites: Algunos ejemplos son los nanocompuestos, las cerámicas metal-carbono o nitrometal y las aleaciones intermetálicas complejas.
5. Por su estructura:
A granel: tornillos, clavos, chapas, etc.
Recubrimientos: como protección o bioactivos
Poroso: capa superficial metálica porosa, andamios de aluminio para ingeniería de tejidos, etc.
Clases de materiales biocompatibles
1. Los materiales dentales que han sido tratados por separado pueden ser colocados en interiores o exteriores, incluyendo en esta categoría. Actualmente, reparan o reemplazan la piel o los tejidos óseos naturales dañados y, en el futuro, pueden utilizarse en tejidos orgánicos como el hígado o los riñones.
2. Los biomateriales están sujetos a situaciones adversas, ya que están expuestos temporal o permanentemente a fluidos corporales donde ocurre la corrosión de los componentes del implante, o el implante causa envenenamiento del organismo vivo.
3. Los biomateriales restauran las funciones de los tejidos y órganos vivos del cuerpo. Por lo tanto, es esencial entender las relaciones entre las propiedades, funciones y estructuras de los materiales biológicos, ya que las propiedades requeridas de un material varían según la aplicación particular. Es importante admitir que el ensayo físico-químico de los materiales para la implantación in vivo es casi imposible. Sin embargo, se deben realizar pruebas in vitro antes de la implantación.