otra pregunta perdon a que nos referimos si decimos "el motor del cuerpo"? la primera es al cerebro segunda es a las canas y la tercera es al corazon
ayudenme gracias :c
Respuestas a la pregunta
Respuesta: Empezamos viendo qué no es perdonar para delimitar conceptos. En este caso, la definición por medio de lo que no es, es muy necesaria e interesante. Perdonar no es:
Dar la razón; perdono, pero eso no significa que comparta tus motivos o las razones que te llevaron a ello; perdono, pero no estoy de acuerdo.
Otorgar clemencia. La clemencia, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua es: «compasión, moderación al aplicar la justicia». Podemos ser compasivos, es cierto, pero no hasta el punto de solidarizarnos emocionalmente con el agresor.
Renunciar a la justicia. El culpable, debe pagar. Es, más bien, ejercer la justicia sin rencor, sin ira. Exijo justicia por principios. Perdonar no es dar una amnistía.
Reconciliación con el agresor. No tiene por qué ser así. Perdonar no significa entablar de nuevo una relación. Perdono lo que has hecho, pero no podemos empezar como si no hubiera pasado nada. La reconciliación, además, es un sentimiento que implica a dos.
Dejar de sentir. Perdonar no implica directamente dejar de sentir el dolor que nos han causado… implica dejar de querer seguir en ese dolor. Nada hace que dejemos de sentir, quizá sólo el paso del tiempo, pero la decisión de perdonar tiene que ver con no dejar que el sentimiento se apodere de la vida.
Olvidar. El olvido es un proceso involuntario que se dará o no en el tiempo. El olvido no se puede forzar, llega o no, pero sin obligarse a ello. La gente suele comentar, en una frase hecha, «perdono, pero no olvido». En muchas ocasiones es mejor que sea así, porque si olvidamos es posible que caigamos otra vez en lo mismo, que nos descuidemos y no estemos preparados para hacer frente a situaciones similares. El perdón empieza por querer que el tema en cuestión no inunde la vida, sino que ocupe su justo lugar en nuestra historia. El olvido, ya llegara. No es adaptativo borrar de nuestra base de datos al infractor y quedar en riesgo. Un golpe en la cabeza, por ejemplo, puede provocar el olvido, pero no el perdón. Si perdonas, el recuerdo sigue, pero no hace daño. El olvido tiene varias facetas: el olvido emocional, donde ha desaparecido el odio o rencor; el olvido afectivo, que permite recuperar la situación afectiva previa a la ofensa y, por último, el perdón conductual, que lleva a tratar al otro como si no hubiera existido la ofensa. De forma realista, somos conscientes de que llegar a los tres niveles es complicado. Tampoco existe la necesidad de llegar al máximo.
Explicación:
ES PERO QUE LES AYUDE