Organización social de los asirios
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Hola esto escontre en mi cuaderno espero que te sirva
Explicación:
Organización social
Primitivamente, la población se dividió en clanes de origen común, sólidamente organizados. Eran patriarcales y el hombre era el jefe de la familia, poseyendo una autoridad ilimitada, tanto en el aspecto civil como en el religioso. Debido a que el predominio de la realeza era absoluto, los asirios carecían prácticamente de clases sociales y el resto del pueblo estaba esclavizado bajo el directo poder militar del soberano.
Por su parte los caldeos, rigieron sus costumbres por medio del Código de Hamurabi, según el cual la sociedad comprendía tres clases bien definidas: la nobleza, los hombres libres y los esclavos. Ésta última era la más numerosa y se hallaba formada por los prisioneros de guerra, los esclavos de nacimiento y los castigados por delitos.
La justicia se administraba aplicando al culpable un castigo equivalente al daño cometido, principio sintetizado en la frase "ojo por ojo, diente por diente", lo que se llamaba ley del Talión. El código reglamentaba el ejercicio de las profesiones y aseguraba la protección de las viudas, huérfanos y pobres. El marido y la mujer estaban unidos en matrimonio por un contrato, cuyos aspectos más importantes eran los que se referían a los bienes de los esposos y al reparto de las herencias.
Respuesta:
La noble: Estaba formada por el rey quien era amo del país y recibía la fidelidad de todo el pueblo. De él dependían los ejércitos, los estados conquistados y las provincias.
Los libres: Contaban con la posibilidad de tener algún privilegio como ser miembros del gobierno, ser comerciantes y en su defecto artesanos o trabajadores jornaleros.
Los esclavos: Estos lo comprendían los deudores y los prisioneros de guerra, por lo que no contaban con ningún privilegio.
Explicación:
Dato extra: Todos los pobladores se regulaban con un código de derecho con penas severas que se comparaban al daño causado. El principio rector era el de ojo por ojo, también conocido como ley del Talión. Esta misma aseguraba la protección de las viudas, huérfanos y pobres.