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Respuestas a la pregunta
Respuesta:
"La labor principal de un socorrista acuático es prevenir. Los rescates no nos gustan, si entramos en el agua es porque hemos hecho algo mal en la fase previa. No es normal tener 20 y 30 rescates diarios en determinadas playas. Será porque hemos hecho algo mal en la prevención y porque la población no ha hecho caso a los avisos que se colocan", explica el canario. Por tanto, su trabajo cuando se incorporan al servicio empieza por una composición de lugar, es decir, analizar cómo está la situación ese día: meteorología, situación del mar, afluencia... Con esos datos podrán decidir sobre qué color de bandera poner.
Explicación:
1. Vigilancia y salvamento
Hay bañistas imprudentes que deciden ignorar las indicaciones y hay otros que se pueden marear dentro del agua o sufrir un calambre, por ejemplo. La labor del socorrista en estos casos es la vigilancia permanente y el rescate. Por ello, existen zonas estratégicas de vigilancia: cada 300 metros hay un socorrista de Cruz Roja elevado, a pesar de que ninguna normativa especifica cuál debe ser la distancia.
2. Los responsables de las banderas
La bandera roja es una indicación. El socorrista debe informar de ello, "pero la gente muchas veces no hace caso y no podemos pedirles el nombre, tenemos que apoyarnos en la Policía para que haga acto de presencia, identifiquen y denuncien".
Por ello, los socorristas ponen la bandera roja en coordinación con un representante municipal. Además, tal y como indica Sánchez Arrocha, "una bandera roja es un problema para un municipio o para una red hotelera que gira en torno a una playa". Lo ideal, entiende, sería que una patrulla de Policía se desplazara hasta la playa para acompañar a los socorristas: "Cuando vemos que nos van a sancionar lo entendemos de manera diferente a una recomendación".
3. Llevar a efecto la normativa municipal
Deben llevar a efecto la normativa municipal. Si ven que alguien salta al agua desde una zona que no es segura (porque no hay suficiente profundidad o porque hay gente nadando en la zona, por ejemplo), tienen que acercarse y decirle que desista, pero si no lo hace no pueden retenerlo. En ese caso, solo les queda recurrir nuevamente a la Policía.
4. Llamar la atención a bañistas ebrios
Sí, existen incidencias de ese tipo también y deben abordar a la persona en estado de embriaguez. Al igual que si detectan a un bañista con movilidad reducida, deben hacerle saber el riesgo que asume al entrar al agua. Detectan la situación de riesgo y la vulnerabilidad de cada persona y el aviso cae inmediatamente. Sin embargo, es complicado porque no pueden "montar un servicio específico para cada persona. Las playas están masificadas, sobre todo en el Levante. Es muy complicado detectarlo", indica el responsable del servicio.
5. Activar el protocolo de actuación ante la presencia de tiburones y medusas
El pasado verano aparecieron varios tiburones pequeños en las playas del levante. En el caso de tener la más mínima sospecha de su presencia o si se ha visto alguna aleta, se coloca inmediatamente la bandera roja y hay que desplegar a todos los socorristas ante la lámina de agua para que el mensaje llegue lo antes posible. Además, se apoya el servicio con embarcaciones o motos de agua para avisar a quienes están dentro del mar.
Con las medusas también existe el protocolo. "La bandera no solo habla del oleaje. Si se detecta que hay muchas medusas, existe una bandera específica que acompaña a la otra (es blanca con dibujos de medusas)", explica.
6. Prestar asistencia sanitaria
Se encargan de las rozaduras de las medusas, picaduras de insectos u otros problemas por el estilo. Los socorristas complementan siempre el servicio con la asistencia sanitaria, aunque por niveles. Puede haber incluso un médico en la playa dando servicio, o que haya dotación sanitaria de un enfermero, pero siempre se da ese tipo de asistencia. Si la lesión es solo cutánea y no hay reacción nerviosa se le da el alta en la misma playa, igual que con cualquier herida leve. A veces ponen ellos mismos la ambulancia y en otras ocasiones se encarga de ello el sistema público.