Nombrá cada una y todas las posibilidades que tiene
(por ejemplo según el tipo de voces….coro de voces
blancas)
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Los niños pertenecen a la Voz blanca o voz infantil se refiere a la voz musical de los niños antes de su pubertad. Una laringe infantil es más corta que la de una mujer, y mucho más que la de un varón, por lo que las voces blancas son muy agudas.1 Por lo general, la tesitura de un niño es mucho menor que la de un adulto, una octava frente a dos.1 Además de por su tesitura aguda y poco extensa, las voces infantiles se distinguen por no estar desarrolladas musicalmente, y no tener, por tanto, la riqueza tímbrica de la de un adulto, y carecer de vibrato: la ausencia de «color» es lo que hace que se denominen «voces blancas».2
Evidentemente, la voz infantil no es constante con la edad: la laringe va creciendo lentamente, por lo que el tono se va haciendo más grave y la tesitura extendiendo: mientras que con tres años de edad puede abarcar de re5 a sol6, y con nueve de la4 a si5, con doce alcanza el desarrollo infantil completo, usualmente de do4 a la5.1 Los valores anteriores son aproximados, y existen muchas variaciones de un niño a otro. De hecho, durante la edad escolar la voz se va fijando, por lo que es posible a partir de un cierto momento clasificar las voces blancas en agudas, medias y graves, que en ocasiones se llaman sopranos, mezzosopranos y contraltos como las voces de mujer.1
Sin embargo, los cambios anteriores son graduales y livianos. En la pubertad (a partir de los doce años en las niñas y los catorce en los niños) se produce una mutación vocal brusca e importante, con la que desaparece la voz infantil:3 acompañando a la madurez sexual, la laringe crece bruscamente hasta su tamaño adulto, y los repliegues vocales crecen unos milímetros en las niñas y hasta un centímetro en los niños, formando la protuberancia externa que se denomina nuez de Adán. Esos cambios físicos determinan que la voz hablada descienda en media tres o cuatro tonos en las niñas y hasta una octava completa en los niños. Además, se produce un periodo de inestabilidad vocal, que acompaña al cambio brusco y que se manifiesta con frecuentes fallos y emisión de notas agudas, conocidas popularmente como «gallos».1
Explicación: