Nesecito una historia de la virgen de Fatima pero muy breve donde se hable de los tres pastorcitos... AYUDA!!!
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es lo mas resumido posibleFrancisco Marto
Nació en Aljustrel, Fátima, el 11 de junio de 1908. Un año después de las apariciones de la Virgen, en diciembre de 1918, cayó enfermo de neumonía y falleció en Aljustrel el 4 de abril de
1919. Está sepultado en la Basílica Santuario de Fátima. A partir de su encuentro con María, medita los misterios del Rosario asiduamente. Impactado sobre todo por la tristeza de Jesús en Getsemaní a causa de los pecados de la humanidad, Francisco desarrolla un amor personal al Señor, sintiendo intensamente la necesidad de hacerle compañía para consolarlo. Su
gran preocupación se vuelve la de “consolar a Nuestro Señor”. Pasa largas horas “pensando en Dios”, por lo que a sus 9 años es considerado un contemplativo. "Se escondía detrás de los árboles para rezar solo; otras veces subía a los lugares más elevados y solitarios y ahí se entregaba a la oración tan intensamente que no oía las voces de los que lo llamaban".
Fue beatificado junto con su hermana Jacinta el 13 de mayo del 2000, año del Gran Jubileo, por el Papa san Juan Pablo II.
Jacinta Marto
Nació en Aljustrel, Fátima, el 11 de marzo de 1910. Se enfermó de neumonía como su hermano Francisco en diciembre de 1918. Estuvo internada en Villa Nueva de Ourém y luego en Lisboa, donde murió el 20 de febrero de 1920. También está sepultada en la Basílica Santuario de Fátima, junto a Francisco. Además de las cinco apariciones de la Cova de Iría, la Virgen se manifestó a Jacinta cuatro veces más durante su enfermedad: en la Iglesia Parroquial, en casa y en los dos lugares donde estuvo internada en Lisboa. El encuentro con Nuestra Señora la lleva a una vida de amor al Corazón de María y al Santo Padre. Su oración por el Papa era constante. Movida por la preocupación de que todos alcancen la salvación y por su amor a María, de todo ofrecía un sacrificio a Dios, como les había enseñado el Ángel. Ofrecer un sacrificio a Dios es “hacer sagradas” todas las circunstancias difíciles que nos tocan vivir.
Fue beatificada junto con su hermano Francisco el 13 de mayo del 2000, año del Gran Jubileo, por el Papa san Juan Pablo II.
Lucía Dos Santos
Nació en Aljustrel, Fátima, el 22 de marzo de 1907. Falleció a los 97 años, el 13 de febrero de 2005 y recibió sepultura en el cementerio del Carmelo de Santa Teresa, Orden de las Carmelitas Descalzas, en Coímbra. Según su voluntad, después de un año sus restos fueron trasladados al Santuario de Fátima, junto a sus primos Francisco y Jacinta Marto. El 13 de febrero de 2008, se dio inicio a la Causa de su beatificación. En la época de las apariciones, los tres niños habían recibido en familia una primera catequesis, pero sólo Lucía había ya hecho la primera comunión. A los 14 años, Lucía entró en el colegio de las Hermanas Doroteas y luego optó por la clausura en el Carmelo, llevando una vida de recogimiento, de soledad y silencio, apartada de la curiosidad de la gente. Su Superiora del Carmelo en los últimos años, la Hna. María Celina, dice que la Hermana Lucía “era una persona que emanaba alegría. Relataba la extraordinaria experiencia de 1917, pero nunca decía yo sino los pastorcitos”. Acompañaba con su oración constante y su ofrecimiento al Santo Padre y afirmaba: “Quien no está con el Papa no está con Dios; y quien quiera estar con Dios tiene que estar con el Papa”. En el Carmelo Lucía tuvo otras apariciones de la Virgen (en 1923, 1925 y 1929), quien le pidió, entre otras cosas, la práctica de los primeros sábados de cada mes dedicados al Corazón de María. Allí también escribió dos volúmenes con sus "Memorias" y los "Llamamientos del Mensaje de Fátima".
Nació en Aljustrel, Fátima, el 11 de junio de 1908. Un año después de las apariciones de la Virgen, en diciembre de 1918, cayó enfermo de neumonía y falleció en Aljustrel el 4 de abril de
1919. Está sepultado en la Basílica Santuario de Fátima. A partir de su encuentro con María, medita los misterios del Rosario asiduamente. Impactado sobre todo por la tristeza de Jesús en Getsemaní a causa de los pecados de la humanidad, Francisco desarrolla un amor personal al Señor, sintiendo intensamente la necesidad de hacerle compañía para consolarlo. Su
gran preocupación se vuelve la de “consolar a Nuestro Señor”. Pasa largas horas “pensando en Dios”, por lo que a sus 9 años es considerado un contemplativo. "Se escondía detrás de los árboles para rezar solo; otras veces subía a los lugares más elevados y solitarios y ahí se entregaba a la oración tan intensamente que no oía las voces de los que lo llamaban".
Fue beatificado junto con su hermana Jacinta el 13 de mayo del 2000, año del Gran Jubileo, por el Papa san Juan Pablo II.
Jacinta Marto
Nació en Aljustrel, Fátima, el 11 de marzo de 1910. Se enfermó de neumonía como su hermano Francisco en diciembre de 1918. Estuvo internada en Villa Nueva de Ourém y luego en Lisboa, donde murió el 20 de febrero de 1920. También está sepultada en la Basílica Santuario de Fátima, junto a Francisco. Además de las cinco apariciones de la Cova de Iría, la Virgen se manifestó a Jacinta cuatro veces más durante su enfermedad: en la Iglesia Parroquial, en casa y en los dos lugares donde estuvo internada en Lisboa. El encuentro con Nuestra Señora la lleva a una vida de amor al Corazón de María y al Santo Padre. Su oración por el Papa era constante. Movida por la preocupación de que todos alcancen la salvación y por su amor a María, de todo ofrecía un sacrificio a Dios, como les había enseñado el Ángel. Ofrecer un sacrificio a Dios es “hacer sagradas” todas las circunstancias difíciles que nos tocan vivir.
Fue beatificada junto con su hermano Francisco el 13 de mayo del 2000, año del Gran Jubileo, por el Papa san Juan Pablo II.
Lucía Dos Santos
Nació en Aljustrel, Fátima, el 22 de marzo de 1907. Falleció a los 97 años, el 13 de febrero de 2005 y recibió sepultura en el cementerio del Carmelo de Santa Teresa, Orden de las Carmelitas Descalzas, en Coímbra. Según su voluntad, después de un año sus restos fueron trasladados al Santuario de Fátima, junto a sus primos Francisco y Jacinta Marto. El 13 de febrero de 2008, se dio inicio a la Causa de su beatificación. En la época de las apariciones, los tres niños habían recibido en familia una primera catequesis, pero sólo Lucía había ya hecho la primera comunión. A los 14 años, Lucía entró en el colegio de las Hermanas Doroteas y luego optó por la clausura en el Carmelo, llevando una vida de recogimiento, de soledad y silencio, apartada de la curiosidad de la gente. Su Superiora del Carmelo en los últimos años, la Hna. María Celina, dice que la Hermana Lucía “era una persona que emanaba alegría. Relataba la extraordinaria experiencia de 1917, pero nunca decía yo sino los pastorcitos”. Acompañaba con su oración constante y su ofrecimiento al Santo Padre y afirmaba: “Quien no está con el Papa no está con Dios; y quien quiera estar con Dios tiene que estar con el Papa”. En el Carmelo Lucía tuvo otras apariciones de la Virgen (en 1923, 1925 y 1929), quien le pidió, entre otras cosas, la práctica de los primeros sábados de cada mes dedicados al Corazón de María. Allí también escribió dos volúmenes con sus "Memorias" y los "Llamamientos del Mensaje de Fátima".
genesisc1513:
Gracias de verdad
de nada
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