necesito un cuento corto en tercera persona, me urge
Respuestas a la pregunta
El narrador en tercera persona es el que se encuentra casi siempre fuera de la historia, la voz narrativa se dirige a uno o varios personajes de forma directa. El narrador en tercera persona puede clasificarse en tres tipos, según el conocimiento que tienen del mundo creado por el autor.
Narrador omnisciente: Conoce a detalle la historia, expone y comenta las actuaciones de los personajes y los acontecimientos que se van desarrollando, se interna en los personajes y le cuenta al lector los pensamientos mas íntimos que cruzan su mente, sus estados de ánimo y sus sentimientos, parece saber lo que ha ocurrido en el pasado y lo que va a ocurrir en el futuro.
Narrador testigo: Está incluido en la narración pero no forma parte de ella, solo cuenta lo que ve sin participar directamente, solo narra lo que ve y presencia.
Narrador equisciente: Se identifica con personaje determinado y cuenta solo aquello que conoce el personaje o aquello que le han contado, solo puede relatar lo que el personalmente haya vivido o entendido sobre determinado asunto.
A continuación, un cuento corto narrado en tercera persona con un narrador de tipo omnisciente.
Pensamientos de desamor
Claudia siempre había tenido mala suerte en el amor, nunca fue correspondida, en su cabeza rondaba la posibilidad de que quizá ella no estaba hecha para vivir una historia de amor.
En ocasiones pensaba que tal vez era muy exigente, pero en otras ocasiones la depresión y la duda la atacaban y la hacían cuestionarse todos los aspectos físicos y de personalidad que quizá no agradaban a la gente, especialmente a los hombres.
Ella no decidía de quien enamorarse, simplemente pasaba, podían ser personas muy atractivas o no tanto, pero siempre tenían algo en común eran personas que de una u otra forma notaban algo especial en ella y la hacían sentirse diferente por un momento.
Ella se mantenía totalmente embobada por esta persona hasta que notaba algo de falsedad o algo cuestionable en su forma de actuar e inmediatamente actuaba a la defensiva y lo descartaba de su vida, por eso, sentía que inevitablemente su destino era la soledad. A partir de ese día decidió que todo iba a cambiar que su actitud iba a ser diferente.