necesito los personajes protagónicos, antagónicos, segundarios de la obra de teatro de el cuarto de los espíritus, por favor
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
cuando los autores noveles empiezan a escribir sus primeras historias, es habitual que centren todos sus esfuerzos en desarrollar su idea inicial. una vez superado el bloqueo de la página en blanco, escriben y escriben. sin embargo, a menudo se olvidan de desarrollar correctamente sus personajes. como consecuencia, nos encontramos con protagonistas que no logran empatizar con la audiencia, antagonistas poco creíbles e incoherencias en sus acciones. para que esto no te ocurra, protagonista y antagonista son los personajes principales que debes aprender a desarrollar, aunque lo recomendable sería que no te olvidaras tampoco de los secundarios.
contar con unos personajes bien construidos ayudará a que tu historia sea más convincente. esto te ayudará a alcanzar más fácilmente los objetivos que te hayas marcado con el storytelling. dicho de otro modo, tu mensaje llegará mejor al receptor.
tabla de contenidos [ocultar]
protagonista y antagonista: personajes imprescindibles
héroes y villanos: ¿quién es quién?
personajes secundarios: por qué los necesitas
construir un personaje en 3 sencillos pasos
storytelling para emprendedores
protagonista y antagonista: personajes imprescindibles
como decíamos, protagonista y antagonista son los personajes clave de toda historia. mientras que el protagonista es el personaje principal, con el que nuestro público debe empatizar, el antagonista representa la fuerza opuesta que le impide alcanzar su objetivo. la presencia del antagonista es imprescindible para que se produzca el conflicto. si nuestro protagonista pudiese alcanzar su meta desde el principio, nos quedaríamos sin historia. debe existir algo (o alguien) que le impida llegar a ella. el antagonista, por tanto, puede ser una persona, un conjunto de personas e, incluso, una institución.
en cuanto al protagonista, es importante que recorra un camino transformador desde que comienza la historia hasta que esta termina. cuando llega el punto de catarsis, el protagonista debe haber aprendido una valiosa lección que le haya cambiado para siempre. no importa lo corta o larga que sea tu historia. si tu objetivo es que tu premisa se comprenda y persuada a tu audiencia, el primero que debe experimentarla es el protagonista.