nececito un resumen largo de cómo está el rio Bogotá hoy en día, lo nesecito rápido porfa
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El río Bogotá es uno de los ríos del departamento de Cundinamarca, en el centro de Colombia. Es el principal cauce fluvial de la sabana de Bogotá. No es navegable ni caudaloso. Desemboca en el Magdalena, que llega al mar Caribe. En su cuenca viven unas 9.000.000 de personas, de los cuales 8.500.000 en Bogotá. Tiene una longitud aproximada de 380 km. Presenta altísimos niveles de contaminación. Aunque está contaminado desde muy cerca de su nacimiento, el grueso de los tóxicos y desechos industriales y urbanos se los debe a Bogotá. Desde hace varias décadas se han desarrollado programas e iniciativas para descontaminarlo.
Por sus características físicas, pero también por sus diferentes niveles de contaminación, se suele dividir el recorrido del Bogotá en las siguientes tres partes:
Cuenca Alta
El río Bogotá nace en el páramo de Guacheneque en las proximidades del municipio de Villapinzón al norte de Cundinamarca a una altura de 3.300 m s. n. m., recorre la provincia de Almeidas y la sabana de Bogotá de norte a sur bañando con su agua los municipios de Cundinamarca y localidades de Bogotá: Villapinzón, Chocontá, Suesca, Sesquilé, Gachancipá, Tocancipá, Zipaquirá, Sopo, Cajicá, Chía, Cota, Suba, Engativá, Fontibón, Kennedy, Bosa, Funza, Mosquera y Soacha. En la cuenca alta el río tiene un caudal medio de 10 m³/s.
Cuenca Media
En la ciudad de Bogotá recibe las aguas de los ríos Salitre y el Fucha, así como la mayor parte de los desechos líquidos contaminantes (22 m³/s) y algunos desechos sólidos que lo convierten en un cauce de aguas negras muy contaminadas. Uno de sus principales afluentes es el río Tunjuelo, que nace en el Páramo de Sumapaz en la laguna de Los Tunjos, luego de surtir con sus aguas los embalses de Chisacá y La Regadera desemboca en el Bogotá.
En las inmediaciones de las localidades de Engativá y Bosa y los municipio de Tocancipá, Chía, Soacha recibe además las aguas de diferentes fábricas. El agua del río se usa para el riego en el distrito La Ramada abajo de la ciudad de Bogotá.
Cuenca Baja
El Salto del Tequendama.
En la mitad de su recorrido el río abandona la Sabana de Bogotá, deja atrás su caudal apacible y se y se precipita formando el embalse del Muña, en el poblado de Chusacá en el municipio de Soacha, y después al salto del Tequendama, también en Soacha. En este sitio, el río empieza su torrentoso descenso entre encañonados valles en busca del río Magdalena pasando por los municipios de San Antonio del Tequendama, Tena, La Mesa, El Colegio, Anapoima, Apulo, Tocaima, Agua de Dios, Ricaurte y Girardot.
Desemboca a 280 m s. n. m. en el Magdalena, en la ciudad de Girardot, tras descender 3.020 metros.
Contaminacion
El río Bogotá tras salir del embalse del Muña en Sibaté.
Desde su nacimiento en el municipio de Villapinzón, en la provincia de Almeidas, el río Bogotá recibe la contaminación proveniente de varias curtiembres artesanales que arrojan sus desechos al río. Las autoridades han tomado medidas para sancionar a los responsables de esta contaminación, sin embargo la solución a esta problemática es compleja, pues la aplicación de sanciones generalmente afecta a la población económicamente vulnerable que vive de la industria del cuero.
Los desechos de las curtiembres no solo afectan el cauce alto del Bogotá, sino su principal afluente el río Tunjuelo debido a que varios artesanos de Villapinzón se han asentado a orillas de este río.
El desarrollo industrial de la provincia de Sabana Centro introduce una alta cuota de contaminación en el río que a su paso por Bogotá recibe tres de sus principales afluentes los cuales descargan las aguas residuales provenientes de la ciudad. Los ríos Salitre, el Fucha y el Tunjuelo.
Entre la desembocadura del Juan Amarillo hasta el salto del Tequendama, el Bogotá se considera un río muerto pues no posee vida macrobiótica alguna. Son variadas las causas. A la carga de desechos biológicos e industriales aportada por alrededor de ocho millones de habitantes tanto de la capital, como de los municipios de la Sabana, en este tramo el río es un típico río de planicie, con un mínimo de velocidad lo que acentúa su septicidad y hace prácticamente imposible la autodepuración para las altísimas cargas orgánicas que recibe, sumado a la contaminación atribuida a objetos contundentes de todo tipo arrojados irresponsablemente por parte de habitantes aledaños al fondo de su cauce lo que acentúa aún más el riesgo de inundaciones en zonas vulnerables en torno al mismo. En este tramo las aguas no poseen oxígeno.
En el Salto del Tequendama, abandona la sabana homónima y entra en la provincia del Tequendama. Igualmente en su parte baja recibe las aguas de varios ríos más limpios que, junto con un discurrir más rápido, diluyen paulatinamente el nivel de contaminación.