movimiento literario de la quema de judas
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
—[4]→ —5→
Por fin sonó la campanilla.
Las doce. Los ordenanzas con ese entusiasmo con que todos los ordenanzas dan por terminado el trabajo, cerraron las pesadas puertas del Banco.
Quedaban algunos clientes rezagados, pero a Dios gracias, no en su ventanilla.
Con gesto mecánico corrió la puertecilla corrediza, y arrojó, como si fueran un manojo de basuras, los billetes del último depósito que había recibido.
Miró el cesto, estaba lleno hasta los bordes.
Calculó que le llevaría una hora, y puso manos a la obra.
Lo de todos los días. El balance de Caja. La entrega del dinero y los comprobantes, la firma de las planillas. El conforme del Tesorero. Y a casa.
Mirando el montón de dinero, pensó con cierta esperanza que bien se merecía una diferencia a favor. Como la que saliera en febrero del año pasado.
Treinta mil guaraníes.
Fue una locura callárselo. Pero se calló.
Un reclamo en estos casos es cosa seria. Por eso —6→ hay que curarse en salud como quien dice, e incluir la diferencia en el parte diario.
Explicación:
hola