monologo sobre un familiar
Respuestas a la pregunta
En mis años mozos disfrutaba de las reuniones que teníamos en el salón grande de Pancho… Todas las tardes jugábamos póquer y las damas canasta.
Un día entró una jovencita que tenía el cabello negro y los ojos tan azules como el lapislázuli, la piel era clara y su sonrisa sutil, tenía la mirada suave y una hermosa voz; ella se llamaba Isabel.
Vivía con su madre viuda (Porque si no este cuento no se desarrollaría como trágico) trabajando en lo que podía; ya sea barriendo, lavando ajeno, vendiendo comida rápida o rematando baratijas en el tianguis.
Una tarde fui a un centro nocturno a disfrutar de un show de comediantes, y ahí la vi, estaba tratando de vender sus baratijas, cuando la sacó el encargado. Yo la seguí con discreción detrás del empleado, cuando estuvimos afuera y el empleado se metió, ella me vio.
Fue amor al instante, pero tenía que irse, yo lo comprendí, tenía que esperar un poco. Pero de pronto se abrió el pavimento y se hizo un bache de 3 m de ancho y 2 de profundidad, y ahí murió…..,
¡Por que!, ¡vida ingrata! ¡¿Qué e hecho yo, para que me arrebates en tan horrible transe el amor de mi vida?! ¡Ella tan hermosa, y productiva! ¡Era la mejor persona que conocía!
La sepultaron hoy en la tarde, yo asistí al velorio, su mamá estaba inconsolable vendiendo pan y café, para costear el sepelio; me despedí de ella en el cementerio, pero la visitare el día de muertos.