“Mal ejemplo”. Elvira Lindo.
Publicado en El País el 20 de noviembre de 2013.
Estamos ante un sistema perverso que ahoga el potencial de igualación social de la enseñanza pública, su misma razón de ser. Se reducen las plazas de interinos, no se aumentan las de fijos, sube la ratio de alumnos por aula y los profesores se ven obligados a aumentar sus horas lectivas, convirtiendo la jornada laboral en una carrera atolondrada de una clase a otra y, a menudo, de un universo a otro, dado que hace tiempo que los niños más tiernos comparten el instituto con alumnos de bachillerato. A los profesores no les llega la camisa al cuerpo y sufren ese desgaste sabiendo que ya no hay bajas que valgan, que las jubilaciones se retrasarán y, que una vez que se apague el ruido de las manifestaciones públicas, ellos solos habrán de enfrentarse a la precariedad diaria. Así ha sido siempre.
Me pregunto si, de verdad, somos conscientes de eso. Hablamos de la desaparición de la Filosofía o de las asignaturas artísticas, cuando lo cierto es que una parte alarmante del alumnado no sabe escribir o leer con soltura. A eso se suma un asunto más turbio que ha ido complicándose en los últimos años: la mala educación. Abundan los problemas de mal comportamiento. Pero, ¿cómo podría ser de otra manera? No es solo la escuela quien educa, ni tan siquiera son los padres los únicos responsables. Es la sociedad misma la que marca el tono: el ambiente que se palpa en la calle; el lenguaje que se emplea en los medios de comunicación; la consideración pública de los educadores; el respeto que los padres muestran hacia el profesorado; la forma en la que nosotros mismos, los que opinamos públicamente, utilizamos ese pequeño poder que se nos presta. Todo eso suma, o resta. Y por lo que oigo, leo y veo no me extraña que, además del recorte de recursos a la escuela, estemos también contribuyendo a su deterioro con un ejemplo generalizado de grosería.
CUESTIONES
1) Especifica el tema y el género del texto.
2) Realiza su resumen.
3) Determina la estructura del texto, tanto externa, como interna: párrafos y progresión temática.
4) ¿Qué modalidad oracional predomina en el texto? Pon un ejemplo.
5) ¿Cuál es la función del lenguaje principal en el texto? Justifica tu respuesta y pon un ejemplo. ¿Qué otras funciones del lenguaje detectas? Ilustra tu respuesta con
un ejemplo.
6) Pon ejemplos de los fenómenos de recurrencia semántica que encuentres: Palabras claves, familias léxicas, campos semánticos.
7) Pon ejemplos de fenómenos de sustitución que encuentres: Sinónimos; hiperónimos; palabras-baúl.
8) Identifica los marcadores/conectores textuales que aparecen en el texto y di de qué tipo es cada uno.
9) ¿Crees que se trata de un texto adecuado? Es decir, ¿crees que conecta bien con sus lectores? Justifica tu respuesta.
10) Determina las marcas de subjetividad del texto. Para ello, contempla los siguientes aspectos: uso de la 1ª persona y de verbos de opinión; adjetivos valorativos; tipos de oraciones (exhortativas, desiderativas…); recursos expresivos o figuras literarias; lenguaje afectivo (diminutivos, apelativos, despectivos…); léxico variado (presencia de coloquialismos, neologismos…).
11) En un breve escrito, redacta tu opinión respecto a lo planteado en el texto de Elvira Lindo.
Respuestas a la pregunta
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Respuesta:
.................. Los ciento bro quiero puntos ahorita x eso no te respondo la pregunta
andony4765:
no pasa nada, necesitava ayuda pero no problem
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