Los cumpleaños más celebrados entre los adolescentes y jóvenes latinoamericanos son los 18 años para varones y 15 años para las mujeres. Son ceremonias o fiestas que tienen como motivo el inicio a la vida adulta y la presentación en la sociedad, respectivamente. Estos eventos se reflejan de manera especial. En el caso de los 18, el agasajo suele ser más austero y sencillo, pero busca que el nuevo joven "mayor de edad" sienta que está entrando a una nueva etapa de su vida donde se asumen nuevos retos y responsabilidades. Por otro lado, en los 15, los padres suelen invertir fuertes sumos de dinero para regalar a su hija la celebración soñada, buscando complacer las expectativas de la cumpleañera, de los familiares, amigos y las suyas propias. Muchas adolescentes esperan con gran ilusión y alegría este momento, que desean guardar en su memoria con inmensa satisfacción y recordarlo siempre. ellas ya saben que ya no son niñas, sino que están iniciando algo nuevo en sus vidas. Por eso nos cuestionamos: ¿Crees que podemos motivar a celebrar y participar más activamente de la iniciación cristiana, así como lo hacemos cuando celebramos los 15 y 18 años?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Claro que lo creemos, se queda diminuta la importancia de los 15 y 18 si los comparamos con las celebraciones cristianas, por ejemplo: En nuestro bautismo celebramos que nos volvemos hijos de Dios, nos da la posibilidad de ir al cielo y disfrutar de nuestro fin, la felicidad.
En la misa celebramos la venida de Cristo, y recordamos el gran sacrificio que hizo por nosotros en la cruz, un sacrificio infinitamente más grande que el sacrificio que realiza unos padres para una fiesta. Pero estas celebraciones son espirituales, y dependen de la fé,por ello una persona sin fe prefiere las fiestas ante las fiestas católicas.
Por ello motivar a las personas requiere gran conocimiento y sabiduría, para ayudar a las personas a comprender la importancia de la celebramos católica.