leyenda la dama del taxi corta
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La leyenda dice que una vez un taxista llamado Arlando a primera vista, Arlando se iluminó con la oportunidad, ya que hacia un tiempo en que se había separado de su esposa. Se detuvo con el coche junto a la joven y le preguntó: – ¿Dónde señorita le gustaría ir? Me podría llevar a un lugar cercano de la ciudad? – Pregunta la mujer con tanta dulzura. – La señorita no tiene miedo de estar dando vueltas durante la noche? – Pregunta Arlando, descontento con la respuesta de la mujer misteriosa llévame a los lugares más bellos de la ciudad que serás recompensado. Arlando aceptó la propuesta y pidió a la mujer que subiera al coche. Curiosamente, ella le pidió al conductor que abriera la puerta para ella, porque no podía tocar el pomo de la puerta. Este hecho dejó Arlando muy confuso, pero eligió continuar con el viaje. El conductor sirve como guía durante la noche. La llevó a los lugares más interesantes de la capital del estado, de los museos históricos como MASP, hasta sitios de interés como el Parque Ibirapuera. En todas partes se detuvo, la misteriosa mujer bajó del coche, de nuevo con la ayuda de Arlando para abrir la puerta, y deslumbrado ese momento como un niño viendo algo por primera vez. Hizo girar y se rió, sorprendido por las maravillas que Arlando le presentaba durante el viaje. Arlando estaba tan encantado por la belleza de la chica que ni el sueño era capaz de hacer daño a lo largo del camino. En el camino, la hermosa mujer reveló a Arlando que ese día era su cumpleaños y ella solía caminar por la ciudad en la madrugada para celebrar la fecha festiva cada año. Al mismo tiempo, cuando vieron a un hermoso lago, la señorita se quejó de no poder lavarse las manos. El taxista le preguntó por qué, pero ella respondió que no sería capaz de entender. Arlando nuevo mezclaba con las características peculiares del cliente. Pasaron muchas horas, era casi el amanecer cuando la mujer pidió al taxista que saliera del lugar donde estaba originalmente. Arlando se anima con la cantidad que recibe después de tantas calles transitadas. Él aparcó el coche. Agradeció el viaje y se iba. El taxista le recordó el pago. Ella le preguntó si pasaría a su casa al día siguiente, porque en ese momento no tenía dinero.
Respuesta:
Blah blah
Explicación:
Cool