las tres guerras más problemáticas y más catastróficas que ha hecho la humanidar
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1. La batalla de Verdún (1916)
Un siglo después, Verdún continúa representando el espíritu de resistencia de Francia, acosada e invadida por las tropas alemanas, durante la Primera Guerra Mundial. Más de 750.000 soldados fueron heridos o muertos a lo largo de 300 días en la lucha por una ciudad y sus fortificaciones, Verdún, que Falkenhayn aspiraba a convertir en un fracaso tal para Francia que le obligara a negociar una paz por separado. El colapso jamás se dio, pero el coste en vidas humanas para ambos ejércitos, impotentes ante la artillería rival, fue altísimo.
Ganó Francia, una victoria parcial pero aún no decisiva que cercenaría los planes alemanes. Fue un icono: el sistema de rotación de Petáin obligó a la práctica totalidad de las tropas francesas a pasar por Verdún en algún momento, lo que convirtió a la ciudad en el auténtico bastión de Francia. Para Alemania, fue uno de los destacados momentos en los que estuvo a punto de ganar la guerra y, fatídicamente, no lo consiguió.
2. La batalla de Moscú (1941-1942)
Tras el inicio tardío de la Operación Barbarroja, que en su conjunto es el operativo militar más devastador que jamás haya contemplado el ser humano, las tropas alemanas tomaron rápidamente la mayor parte de Bielorrusia, Ucrania y Rusia occidental, para plantarse a las puertas de Leningrado, Moscú y Kiev al inicio del otoño. Exceptuando Kiev, en Moscú y Leningrado encontrarían una resistencia feroz. Para el caso de Moscú, miles y miles de soldados rusos pobremente equipados pero lanzados a la defensa de su capital.
La batalla de Moscú permitió a Rusia reordenar su ejército tras el hundimiento inicial, y detener a Guderian y compañía a escasos ochenta kilómetros del Kremlin. El invierno y los errores caprichosos de Hitler, además de la duración del envite, provocaron más de un millón de bajas (entre octubre y enero, aproximadamente). En el primer asalto, Alemania estuvo cerca de doblegar a Rusia. En Moscú, a un tremendo coste, no lo permitieron.
3. La batalla del Somme (1916)
Si Verdún fue el símbolo de Francia, el Somme lo fue de Reino Unido. La Primera Guerra Mundial fue un conflicto estático con batallas a gran escala que, si bien no cambiaron prácticamente el panorama del frente durante años, se cobraron la vida de centenares de miles de soldados. En el Somme, una tremenda ofensiva británica en la parte norte de Bélgica con el objetivo de romper las líneas alemanas bien pertrechadas y protegidas, más de 1.200.000 soldados de uno y otro bando fueron heridos o muertos. Una picadora de carne.
Las imágenes son aterradoras, cien años después. Lo exagerado del recuento de víctimas no tuvo correspondencia alguna con el carácter decisivo de la batalla: el Somme es el ejemplo paradigmático de la estabilidad del frente durante la Primera Guerra Mundial, y tras meses de ofensivas británicas, el Reino Unido apenas había ganado un puñado de kilómetros de terreno embarrado y devastado. Un esfuerzo baldío que marcó a toda una generación de británicos.
Explicación:
Espero a verte ayudado dame coronita