Las soluciones se caracterizan por presentar una sola fase. Sus partículas están dispersas en forma homogénea y no se precipitan al dejarlas en reposo. Los coloides aparentemente parecen soluciones, pero no lo son. Explica las razones de esta diferencia y menciona tres ejemplos de coloides.
Respuestas a la pregunta
Los coloides son mezclas homogéneas, al igual que las disoluciones, pero en este caso a escala microscópica se distinguen partículas de una o más sustancias, la fase dispersa o discontinua, que se dispersan en otra sustancia llamada fase dispersante o continua.
En los coloides, las partículas de la fase dispersa son lo suficientemente grandes como para dispersar la luz (efecto óptico conocido como efecto Tyndall), pero no tan pequeñas como para precipitar y separase.
Las partículas de los coloides tienen un diámetro de entre 1nm y 1µm; la de las soluciones son menores de 1 nanómetro. Los agregados que integran los coloides reciben el nombre de micelas.
El estado físico del coloide queda definido por el estado físico de la fase dispersante, que puede ser líquida, sólida o gaseosa; la fase dispersa también puede corresponder a alguno de estos tres tipos, aunque en los coloides gaseosos esta es siempre un líquido o un sólido. Las sustancias coloidales son importantes en la formulación de numerosos materiales industriales de uso habitual y masivo, como pinturas, plásticos, insecticidas para la agricultura, tintas, cementos, jabones, lubricantes, detergentes, adhesivos, y varios productos alimenticios. Los coloides que contiene el suelo contribuyen a su retención hídrica y de nutrientes. En medicina, se administran coloides o expansores del plasma son para expandir el volumen intravascular por períodos más prolongados que lo que se consigue mediante el uso de cristaloides.
Ejemplos de coloides:
Crema de leche Leche Pintura
Gelatina Niebla Humo
Plasma Smog Detergentes
Crema de leche