Las danzas folclóricas dominicanas según Fradique Lizardo
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Baile Ritual de los Congos (Villa Mella).
Muy cerca de la ciudad de Santo Domingo, se practica este baile el cual se acompaña de dos tambores de dos parches, uno largo y el otro pequeño, gran número de maracas y un instrumento, idiófono, muy particular llamado “canoíta”.
Lo característico de esta danza ritual dedicada al “Espíritu Santo” es el traje blanco de los danzantes, la profusión de joyas con que se adornan y sobre todo, la forma especial de cambiar parejas durante el baile. La reina que preside el baile, es una reminiscencia de la época de la esclavitud en que los cabildos y cofradías de origen negro, trataban de preservar sus costumbres, aunque las arroparan de culto católico.
Baile de la Culebra:
Esta es otra de las danzas traídas a nuestro país por los cubanos, aunque de origen africano. Se trata de dar muerte a una culebra, y es una verdadera pieza de teatro folklórico, en el cual interviene mucho la pantomima. Este baile hacía mucho que se había dejado de practicar en los carnavales dominicanos y fue rescatado por Fradique Lizardo, pero posteriores investigaciones han permitido recoger la obra completa, de la cual se presenta la parte de la muerte de la culebra.
Merengue:
Se le llama la danza nacional dominicana por ser conocida y querida por todos. En esta composición coreográfica la pareja central interpreta el “merengue de figuras” tal como fue recogido por Edna Garrido en 1946, en ]acagua, mientras el coro hace figuras del merengue recogido más reciente mente en Licey al Medio. Se agregan además el Merengue “redondo” de Samaná, el “Juangomero” de la Línea y el “Palmbiche” origen Puertoplateño.
Déjame Volver al Nido:
La criolla, es una canción de origen dominicano, que se usó mucho para dar serenatas a fines del siglo pasado, en los primeros lustros del presente. La Paloma, es una bella melodía, con unos textos literarios llenos de ternura y predicando el amor a los hijos sobre todo, esta vez en boca de una paloma, que pide que la dejen criar sus hijos y la matan luego.
Tumba:
Esta fue la danza considerada nacional en Santo Domingo, a mediados del siglo pasado, pero el empuje del merengue, hizo que esta danza se volviera obsoleta y para muchos había desaparecido por completo. En 1947, Edna Garrido grabó la música y en 1955, Fradique Lizardo rescató la coreografía de Margarita Aclames Calderón, una anciana que fue traida a Santo Domingo para que practicara y enseñara la danza. Es baile de cuadrilla con variadas figuras y porte muy aristocrático como era el tipo de danzas de moda en los salones elegantes hasta muy entrado el siglo pasado. Constituye uno de los elementos de la cultura popular dominicana más agradable de ser, por la gallardía y buenas maneras que deben mostrar los practicantes de esta danza en todo momento presenta numerosas figuras, las cuales son ordenadas por el bastonero que dirige a los danzantes.