la niña de sus ojos capitulos completos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Grasias xkos puntos jjjjj
Respuesta:
Era medio día en el mercado central de La Paz, gente de toda clase social acudía a adquirir provisiones, las mejores carnes gordas y las frutas más frescas. Una de las fruteras de más prestigio es doña Saturnina, que muy pícara escoge a su clientela, quien junto con su esposo que atendía desvivido su taller de carpintería criaron a su hija Domy, la que estaba estudiando en un colegio de prestigio de la ciudad porque bastaba un antojo caprichoso de la ella para que sus padres se lo cumplieran.
VOCABULARIO
Provisiones:
Prestigio:
Clientela:
Capricho:
ORACIONES
1.- La gente acudía al marcado por provisiones.
2.- La niña estaba en el colegio de prestigio.
3.-La clientela d Doña Saturnina era distinguida
4.- EL …ver más…
VOCABULARIO
Avizorar: Acechar.
Enjalbegar: Blanquear las paredes.
Pololear: Molestar, importunar, tontear.
Bibelot: Muñeco, figurilla, chuchería.
ORACIONES
1.- Los vecinos avizoraban atreves del zaguán.
2.- los albañiles enjalbegaron las paredes.
3.- la niña pololeaba por la ventana.
4.- compraron muchos bibelots.
CAPÍTULO CUARTO
Domy fue a refugiarse un su dormitorio y se puso a pensar en Ramiro con quien hace un año tubo el embrujo delicioso y romántico de toda adolecente, en la noche reunidas todas las alumnas en el comedor en la última cena al terminar Domy y Rosario se encontraron en el patio donde la larga conversación llegó a una confesión de sincera y patética del origen de sus padres, su calidad social, de el género de vida y de toda su historia Rosarito se separó Domy quien se fue a la cama a humedecer con la amargura su almohada de penosas añoranzas.
VOCABULARIO
1.- Afán: trabajo excesivo, solícito y penoso
2.- Nítido: no confuso, muy preciso.
3.- Enardecer: excitar o avivar.
4.- Leve: de poca intensidad o profundidad.
ORACIONES
1.- Domy tenía el afán de ordenar sus sentimientos
2.- Domy recordaba nítidamente a Ramiro.
3.- los dos adolecentes enardecidos.
4.- el beso leve fue embriagador.
CAPÍTULO QUINTO