la contaminación ambiental por humo de los vehículos y sus efectos en la salud de la personas de la ciudad
Respuestas a la pregunta
Pulmones. Perjudican su revestimiento y provocan tos, sibilancias, disnea y dificultades para respirar, sobre todo en personas vulnerables.
Infartos. El 33% de los infartos cerebrales se debe a la contaminación del aire, según un estudio de la Auckland University of Technology.
Corazón. Las nanopartículas presentes en el aire viajan por la sangre y se acumulan en los vasos sanguíneos, dificultando el trabajo del corazón.
Sueño. Las personas más expuestas al dióxido de nitrógeno y nanopartículas aumentan un 60% su riesgo de sufrir alteraciones del sueño.
Ojos. Aumenta el riesgo de síndrome de ojo seco y de conjuntivitis alérgica. También se incrementan los problemas asociados a las lentillas.
Cáncer. Contribuye con un 10% a la incidencia del cáncer al dañar el material genético o alterar el funcionamiento del sistema hormonal.
Embarazo. Problemas graves como la preeclampsia tienen más probabilidades de aparecer, según un estudio de la Universidad de Copenhague.
Piel. Altera la barrera cutánea y desencadena eccema, manchas de la edad, arrugas y otros signos de envejecimiento de la piel.
Diabetes. Los niños que viven en zonas contaminadas tienen más probabilidades de desarrollar diabetes, según el Centro Helmholtz de Munich.